“Graciela Bustillos, más reconocida fuera que en su propia casa”
Hace 55 años se constituyó el Instituto Mexicano para el Desarrollo Comunitario (IMDEC). Eran los años 60 del siglo XX, en un mundo y modelos polares en lo político, lo social, lo económico, lo cultural, de Occidente-Oriente, Norte-Sur; de movimientos sociales donde la búsqueda y lucha por la libertad movía todo; momentos de revolución social; de jóvenes revolucionarios dispuestos a dar su vida por una sociedad, un mundo mejor. Un decenio de revolución.
En ese entorno Carlos Núñez Hurtado (1942-2008), con otros jóvenes, hombres y mujeres, y su alma-compañera de vida, Graciela Bustillos Sánchez Aldana (1946-1992), movidos también desde su experiencia de fe cristiana y católica (la Iglesia también vivió su propia revolución con el Concilio Vaticano II en los 60), formaron el IMDEC, que en su misión está el impulsar procesos de educación y comunicación popular.
La naturaleza e identidad del IMDEC (www.imdec.net) está en la educación popular, en la utopía, en la esperanza; inspirados y motivados por el educador Paulo Frerire (1921-1997): construir de abajo hacia arriba, desde la periferia; desde el propio sujeto de cambio. El trabajo del IMDEC, con Carlos Núñez desarrolló una metodología de trabajo comunitario; Graciela Bustillos, trabajadora social, técnicas de educación popular, con mayor valoración y reconocimiento fuera de México y Jalisco, que en su propia casa.
Santa Cecilia de los años 60 y 70, en Guadalajara, no sólo fue su casa, sino el punto donde IMDEC adquirió un rostro. Y es en ese punto, donde en el Ayuntamiento de Guadalajara tiene considerado dedicar un espacio a Graciela Bustillos, educadora popular de México y América Latina. Inicialmente se pensó en una efigie, pero en congruencia con el pensamiento de Graciela y Carlos, así como la identidad del IMDEC, el mejor reconocimiento sería la recuperación de un espacio público para la propia comunidad. Por ello está el proyecto autorizado, propuesto por la entonces regidora María Eugenia Arias Bocanegra, para recuperar y rehabilitar el andador que está en la Calle Hacienda de la Colmena, entre Manuel M. Ponce y María Greever, en la Colonia Santa Cecilia.
La mayoría de las efigies y estatuas de nuestra ciudad son de políticos o héroes históricos vencedores. Con la recuperación de un espacio público en honor a Graciela Bustillos y el IMDEC, la mirada y atención estará en lo más transformador: los ciudadanos de a pie, en el sujeto
ironía!_ del cambio.
Por cierto, en Cuba y Argentina hay centros que llevan el nombre de Graciela Bustillos, sus técnicas de educación popularvigentesendiversospaíses;enGuadalajara, en Jalisco, no. ¡Qué