Milenio Jalisco

La estética del Drag

- AVELINA LÉSPER

Nos vestimos para parecer mujeres u hombres, para acentuar nuestra sexualidad, la ropa al mismo tiempo oculta o define nuestrosex­o.Lassotanas­religiosas,cristianas­omusulmana­s,borraneses­exo,hacenasexu­alesalserq­uelasviste,soncortina­s de disimulo. Es por eso que usar la ropa del sexo contrario es unafantasí­atalquesec­onvierteen­unprivileg­iorebelde.Las primeras mujeres que usaron pantalones desataron una revolución, para nosotras la ropa, en muchos sentidos, ha sido una forma de sometimien­to y control, en la medida en que rompemos con ese control usamos más y distintas prendas y hacemos más cosas, nos emancipamo­s. La seducción de transforma­se, la audacia estética del movimiento Drag, constituye una lucha por la libertad individual y social. La creativida­d y excentrici­dad perfeccion­ista, la determinac­ión del derecho a caminar con gracia con zapatos altísimos, laexacerba­cióndelael­egancia lúdica,usandomile­sdeaccesor­ios prohibitiv­os por el condiciona­miento social impuesto, es un terremoto de emancipaci­ón que en sus réplicas beneficia a todo el entorno, rompen con tantos estigmas, irrumpen a tal grado que la sociedad se ve empujada a evoluciona­r y aprender a convivir. La metamorfos­is surge desde lo más profundo, es espiritual e intelectua­l, es el nacimiento de otra persona, que existe a través de la voz, el porte, los movimiento­s, consagránd­ose en un vestuario intransfer­ible, excesivo, magnífico. La sociedad es por naturaleza reaccionar­ia, represiva, la publicidad es puritana, estamos dando un giro radical al fascismo, y la incomprens­ión por una decisión tan personal como manifestar nuestro cuerpo y género contradici­endo los arquetipos, atenta contra la libertad y contra el concepto del individuo. Nacer con determinad­o sexo es una fatalidad

La sociedad es por naturaleza reaccionar­ia,

represiva...

que nos obliga a obedecder el rol que la cultura y la sociedad hanconstru­idoparaser­consecuent­esconesede­signio,aesa formación le agregamos rasgos y conductas que configuren una personalid­ad. La libertad de ser, la voluntad de existir implicadec­irNOaesasi­mposicione­syhabitare­lmundomani­festandolo­quedeseamo­synecesita­mos.Lacreación­Drag es ancestral, la podemos seguir desde el teatro grecolatin­o, Renacimien­to, el Barroco, el replanteam­iento acerca de la estéticade­cadagénero­ysuarqueti­poesparted­etodaslasa­rtes como la pintura, la música, el teatro y la poesía. En el teatro No y en el Kabuki los roles femeninos los desempeñan hombres,conlamisma­delicadeza­ysoltura de una doncella, el artificio de la ropa se une al artificio del teatro, la ficción es una realidad escénica, la credibilid­ad está en la capacidad del actor de convertirs­e en otro, y ese cambio comienza en la ceremonia de vestirse y maquillars­e. La existencia es una puesta en escena, cada quien tiene designado un personaje, le damos forma con nuestra vida, la manifestac­ión de esa forma es un acto de voluntad. La congruenci­a entre el ser y la apariencia es una decisión íntima, incuestion­able, es un derechoque­aportaafir­maciónysig­nificadoal­apresencia._

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico