Que el ganso no se canse
Andrés Manuel López ObradornoseráPresidente de la República por seis años.Laencomiendapopularrecibidaes por cinco años y diez meses, 2,130 días. A partir de la reforma político-electoral de 2014, su periodo de gobierno concluirá el 30 de septiembre de 2024, de acuerdo con el artículo 83 de la Constitución Política de México, y como quedó asentado en el Bando Solemne en el que se dio a conocer al Presidente Electo (ver DOF http://bit.ly/2E93hcP).
Ayer seguí la transición del Poder Ejecutivo federal desde el posicionamiento delospartidospolíticosenelCongresode la Unión, la toma de posesión y la entrega del bastón de mando de pueblos originarios en el Zócalo de la Ciudad de México. Un día intenso, cargado de simbolismos; histórico, como lo han sido con mayor o menor incidencia las transiciones de poder público. En lo personal esperaba algo más. La apertura al público de la Residencia
Oficial de Los Pinos es el sellodelacasa;elsímbolo manifesto de otra forma de ejercer el poder público, ahora “más cercano” en la persona del Presidente; un mensaje de reconciliación instituciones-pueblo. Alapar,lacoberturamediáticaatravésde medios convencionales volcada con un “¡hamuertoelRey,vivaelRey!”.
Del Presidente esperaba un mensaje de unidad, de inclusión social. Insistir en la polarización, sobre todo al final de su exposición de cien compromisos en el Zócalo en torno a una amenaza de “conservadores” que desean volver, me hizo verlo como si estuviese en campaña. Los “conservadores”paraLópezObrador,infiero, son los del modelo neoliberal, aunque aún no me queda claro señalar como causa a un modelo económico, social y político, y mantenerse en él, pactando con él de manera selectiva.
Los riesgos que expuso por la mañana elSenadordeJalisco,ClementeCastañedaHoeflich,seconfirman(ver:http://bit. ly/2Q5Ui2t).
Eltiempoesimplacable. Comenzó la cuenta regresiva para él y su equipo con vistas al 30 de septiembre de 2024. Elserviciopúblicoencomendado es como la leche: tiene fecha de caducidad, pero corre el riesgo de que se agríe antes de tiempo.
Que el ganso no se canse, o de lo contrario la “migración” cautivadora y ofrecida por Andrés Manuel López Obrador será más decepcionante que la vivida en otras, como la más reciente de 2000. “Me canso ganso”, dixit Tin Tán; “¡Arrrrroz!, dixit Mauricio Garcés; “Pos ya sabes que yo como digo una cosa digo otra”, la Chimoltrufia.
El servicio público encomendado es como la leche: tiene fecha de caducidad