Banamex, a la venta con todo y arte

En la 4T saltaron de emoción cuando el banco estadunidense Citi anunció la venta de Banamex. Para el gobierno federal esto significa la posibilidad de que el banco vuelva a manos de mexicanos, y hasta quieren adueñarse del patrimonio cultural que posee.

Pero no es tan sencillo. Me explican que las obras artísticas y los inmuebles históricos de Banamex sí se venderán, pero dentro de todo el paquete de activos como la banca comercial, la banca empresarial, la Afore Citibanamex, la división de seguros, edificios de oficinas, sucursales y el acervo cultural, del cual el gobierno podrá vigilar que se mantenga en México, pero no quedárselo, a menos, claro, que el nuevo propietario de Banamex se lo endose.

Aunque el patrimonio cultural de Banamex parece la joya de la corona dentro de la transacción multimillonaria que implicará su venta, no se trata solo de que las obras e inmuebles cambien de manos, sino de mantener las acciones de conservación, restauración, adquisición de obra, investigación y difusión por las que todo ese patrimonio está intacto.

Es la colección privada más importante del país, que incluye obras de Diego Rivera, Frida Kahlo, David Alfaro Siqueiros, Remedios Varo, José María Velasco, Leonora Carrington, José Clemente Orozco, Eulalia Lucio y Francisco Toledo. Además de 52 obras, unas de ellas repatriadas, de Calvé, Morales, Toledo, Gerzso, Corzas y Rahon.

Banamex también posee inmuebles históricos como el Palacio de Iturbide, el Palacio de los Condes de San Mateo de Valparaíso y el Museo Casa Montejo; reunió la colección de arte popular mexicano e iberoamericano más importante, y cuenta con un acervo editorial de 252 libros y catálogos publicados.

Así que el sentimiento nacionalista del presidente Andrés Manuel López Obrador por mexicanizar la banca o el del canciller Marcelo Ebrard para que todo este patrimonio cultural pase a manos del Estado son entendibles frente a la venta de Banamex, pero el reto de conservar, ampliar y lucir todo este patrimonio no parece encajar mucho con la “austeridad republicana”. Veremos si convencen al nuevo dueño de Banamex.

El banco tiene la colección privada más importante del país