El paquete económico 2023
Este es un paquete de consolidación, de terminar lo aún inconcluso en materia de infraestructura, incluida la inversión necesaria para una ordenada transición energética.
En lo distributivo, invirtiendo en el sureste mexicano, los habitantes de esa región podremos tener más oportunidades de negocios y empleo, elevando nuestra productividad.
Veinte años tuvieron que pasar desde el estudio realizado por Levy, Kessel y Dávila1 donde insistían en el desarrollo de vías férreas e infraestructura carretera para conectarnos, para verdaderamente ser tomados en cuenta en las inversiones significativas en el sureste. Es por eso por lo que el rubro de gasto programable en infraestructura, comunicaciones y transportes aumenta un 12 por ciento.
Otro sector muy favorecido en el gasto es el de medio ambiente y recursos naturales, dados los compromisos de construir infraestructura de energías limpias.
Agricultura y Desarrollo Rural crece también de manera significativa, un 20 por ciento, para seguir apuntalando el esfuerzo de suficiencia alimentaria y a su vez la política de incrementar la oferta para contrarrestar la inflación importada.
Continúa el esfuerzo en la construcción de un Estado de bienestar, principalmente con el objetivo de dejar a los adultos mayores y discapacitados un ingreso apenas digno, duplicando sus ingresos para 2024.
Dentro de los mismos rubros de bienestar, el sector salud crece poco en su presupuesto, pero este crecimiento comprende el uso de recursos antipandemia, que ahora se usarán para una mejor atención en salud, en especial a los no afiliados, donde esperemos que al final de su administración el Presidente haya logrado concentrar el esfuerzo en el IMSS-Bienestar. Algo similar sucede para el sector cultura, que crece poco pero ya sin el gasto correspondiente a la infraestructura de Chapultepec. El sector educación también se favorece con un crecimiento en sus asignaciones.
Toda esta focalización de prioridades en un ambiente de nulo crecimiento en la deuda con respecto al PIB, y un ambiente de estabilidad financiera.
Continúa el esfuerzo en la construcción de un Estado de bienestar