Qué reforma electoral se quiere
El debate por la Reforma Electoral que proponen el Presidente y Morena, ya está en el Congreso de la Unión, en las redes, y en medios de comunicación. Se presta para un debate sabroso, si no fuera porque se está poniendo en juego mucho de lo ganado. La iniciativa del gobierno que incluye reducir diputados y senadores, reducir consejeros, desaparecer las OPLES y que nos cueste menos el INE, pueden ser debatible, pero hay otras que son cuestionables, como la elección de consejeros mediante voto popular, o la elección de diputados todos plurinominales por listas estatales, la reducción de diputados locales y de regidores, que hay quien señala que se puede poner en riesgo la democracia.
Las propuestas merecerían un debate serio, fuera de la polarización, y debería incluir temas como la segunda vuelta, elecciones primarias, y definir su responsabilidad en la fiscalización de los recursos. Sobran los descalificativos que desde la mañanera se emiten a los adversarios.
Sin embargo, en medio del debate, la pregunta es: ¿cuál es el verdadero propósito de López Obrador con la iniciativa de la Reforma Electoral?
Para nadie es secreto que el organismo lo tiene atravesado, porque insiste en afirmar que le robaron la elección en el 2006; porque no soporta a los consejeros ganen más que él y que no están sometidos a su voluntad.
En los cuatro años de este gobierno ha quedado muy clara la vocación destructora; que sus acciones pareciera que están siempre en función de los resultados electorales y acumulación de más poder.
Que respalda sus decisiones en consultas al pueblo, esa figura etérea, que le ha servido para cometer atropellos contra la constitución. No estoy de acuerdo en todo con los hashtags #elINEnoSeToca”. El INE, como todo, es un organismo perfectible al que hay que abonarle y mejorarle.
Entre los actores hay coincidencias en que INE es perfectible, pero otra cosa es buscar destruirlo para eternizarse o volverlo un apéndice del gobierno. Eso ya lo vivimos. Por lo pronto nos vemos el domingo 13 noviembre.
Entre los actores hay coincidencias en que INE es perfectible