Todo naranja
Naranja, naranja, el rumbo es naranja. Ese es el mensaje que el gobernador Enrique Alfaro lanzó este fin de semana rumbo a las elecciones del 2 de junio próximo. Nada de votos cruzados, nada de simpatías por otro partido. El rumbo, insiste,esnaranja.YlodiceaJuan,quees Movimiento Ciudadano en Jalisco, para que lo escuche Pedro, representado por los electores comunes. Todo naranja.
Tuve oportunidad el pasado viernes de entrevistar a Enrique Alfaro en Casa Jalisco. El tema era un balance de su gestión, pero al final lo importante terminó siendolapartepolíticadeunhombreque si bien gobierna para todos, tiene interés en el futuro de Movimiento Ciudadano.
TaninteréstieneAlfaroderendirbuenas cuentas políticas, que atajó por completo la idea de haberse vendido o negociadosusalidaconotras fuerzaspolíticas.Ylodijo claro: ni funcionario, nicónsul,niembajador, aunque otros gobernadoreshubierantomado ese camino.
¿PorquéelmensajedeAlfaro?Porque está claro que había confusión, y tal vez la siga habiendo, sobre cómo debería ser el voto de los simpatizantes naranjas en Jalisco.
Parte de esa confusión surgió cuando un grupo de ciudadanos en lo particular lanzóunacampañaenespectacularespidiendo el voto dividido: uno para Lemus, y otro para Gálvez. El mensaje en cuestiónalimentólaideadequeenJaliscolos militantes de MC habían dado por completo la espalda a Jorge Álvarez Máynez, su candidato presidencial. Y luego grupos ya con nombre y apellido se sumaron a esa idea, lo que terminó por meter en serios problemas la imagen del partido dirigido por Dante Delgado a nivel nacional, lo que comenzó a reflejarse en las encuestas.
Para frenar el mensaje confuso no hubo más que una medicina: cerrar filas, aunque pareciera difícil. Para ellos hubo reuniones y muchas llamadas telefónicas entre los liderazgos locales y nacionales, con las que se limaron asperezas y se acordaron acciones conjuntas, entre ellas el apoyo irrestricto a Álvaro Máynez.
Pero además hubo al menor una reunión estatal donde se habló de unidad, y de hacer un lado cualquier intento de mandar mensajes confusos a la ciudadana. No una campaña fosfo fosfo, pero sí unacampañanaranja.Poresoelmensaje de Alfaro.
No una campaña fosfo fosfo, pero sí una campaña naranja