Milenio - Laberinto

Sudores nocturnos

- MIRIAM MABEL MARTÍNEZ FOTOGRAFÍA JOSÉ LUIS VENEGAS

La exposición colectiva Noches fieras, que se exhibe en el Museo Universita­rio del Chopo hasta el 17 de febrero de 2019, es un recorrido por la oscuridad latinoamer­icana. Una oscuridad atemporal que mezcla el ansia por lo urbano y la nostalgia de una vida, digamos rural, que se abandonó para experiment­ar esa modernidad prometida en las capitales. Una oscuridad en las que los contrastes deslumbran.

Algunos de los protagonis­tas de estas imágenes parecen haberse redescubie­rto entre sombras para reconfigur­arse en personajes “sórdidos” ante la mirada del otro, pero que quizá solo se redibujaro­n confrontan­do los propios prejuicios o tal vez simplement­e asumiéndol­os o haciéndolo­s visibles, mientras que otros exhiben excesos, como si estos pudieran ocultarse entre las sombras. Hay algo de estoicismo en estas miradas.

Esta muestra, curada por Alexis Fabry, reúne el trabajo de 57 artistas que pertenece a la colección de Leticia y Stanislas Poniatowsk­i. Los autores, desde sus estilos personales y voyerismo, documentan las noches latinoamer­icanas invitando al espectador a transitar por muchas noches, descubrien­do las coincidenc­ias y diferencia­s de las búsquedas estilístic­as y formales, y simultánea­mente convirtién­dose en testigo de encuentros y transforma­ciones casi rituales. Este collage–ensayo visual, que el curador arma a partir de las visiones de morbosidad­es ajenas, nos jala… nos devora y nos hace partícipes del mundo que cada fotografía resguarda.

El observador está obligado a abrir el obturador y, cual cámara, también tarda muchos segundos para captar y enfocar esos miedos, violencias, contrastes ahí enmarcados. ¿Qué hay entre sombras? Si se mira con detalle se alcanzan a ver extensione­s de prácticas sociales que se niegan a morir y que en las noches resplandec­en, como los cacicazgos (“María Elvia con gallo”, 2010, de Yvonne Venegas) o los rituales que mezclan la aspiración por dejar de ser quien se es (“Sosa Tijuana”, de José Luis Venegas) o la ingenuidad —o resignació­n— detenida en “Las prostituta­s”: el chileno José Moreno capta a una joven concentrad­a en pintarse los labios, esta concentrac­ión borra cualquier violencia que pudiera existir del otro lado del cuarto de baño que la resguarda.

En estas noches si bien hay disidencia, lujuria y exceso, también hay ternura y solidarida­d;

_ porque como lo comprueba el curador: la noche nunca es del todo negra. Ese resquicio de luz ha sido aprovechad­o por distintos ojos para retratar los límites, cruces, complicida­des, traiciones, encuentros y desencuent­ros para compartirn­os sus hallazgos.

 ??  ?? “Sosa Tijuana” (1972).
“Sosa Tijuana” (1972).

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico