CAFÉ “TRICICLO” OFRECE SABOR Y AROMAS
Cafés fríos y calientes, le dan sazón a este lugar, garantía de que quien se sube al “Triciclo”, va a regresar
La experiencia adquirida en situaciones laborales previas en cafeterías y restaurantes, hicieron que hace dos años, los hermanos Daniel y Francisco Ruiz González les naciera la idea de establecer un negocio de venta de café y crepas, ofreciendo estos productos en triciclos a diferentes partes de la región y eventos; sin embargo, el plan de negocios cambió, y aunque la idea de las cafeterías móviles en triciclos continúa, el mercado los llevó a instalar una cafetería en forma en lo que iba a ser su centro de operaciones. Hoy tras año y medio de aperturar en la colonia Estrella, la marca “Triciclo”, comienza a posicionarse entre familias, hombres y mujeres que acuden día con día a este punto, viviendo una nueva experiencia que va más allá de tomar una taza de café.
La creatividad y la técnica son evidentes en el diseño del concepto que dan forma a “Triciclo”. Francisco se encarga de la parte administrativa, mientras que Daniel es fuerte en la parte operativa y la atención al cliente. Partes de la estructura del asiento de este vehículo forman los bancos para los clientes en la barra del lugar con todo y pedales. Estratégicamente colocados en el techo, los rines de las ruedas con sus radios enfatizan el concepto hipster, propio para la plática, la lectura y una buena compañía, enmarcado con exuberante vegetación que disponen en jardineras y una pequeña área verde ubicada frente al lugar ubicado en las calles Río Amazonas y Río Danubio.
Arquitecto de profesión, Francisco explica que la idea del restaurante llevó un diseño previo; creando el concepto de negocio con alimentos de consumo regional, para mostrar el orgullo por La Laguna. Inicialmente la idea de negocio fue llevar cafeterías móviles a diferentes lugares y eventos a bordo de un triciclo, café y crepas sería la especialidad, si bien esta iniciativa nació hace dos años, fue apenas hace año y medio que concretaron su proyecto pero de manera distinta a la pensada originalmente.
“Es complicado el mercado, pero lo que buscamos es ofrecer productos que se ofrecen en la región pero en un nivel de calidad más alto, mejorando las recetas con especialistas gastronómicas, ofrecer la comida que se vende en la calle pero con un toque gourmet”, señaló Francisco.
Paninis, ensaladas, la hamburguesa Pollo Diablo, las gorditas y molletes, chilaquiles, crepas entre otros, así como sus smoothies, cafés fríos y calientes, son sólo algunos platillos que le dan sazón a este lugar y que garantizan que quien se sube a este “Triciclo”, regresa. Daniel explica cómo dar ese valor agregado:
“Esto se logra gracias a que los clientes se llevan una experiencia buena del lugar, con una buena plática, un ambiente relajado como en casa, donde platicaron bien, comieron rico, y se sintieron felices; es el plus con el que se llevan un buen sabor de boca”.
El ejemplo de servicio y trabajo inculcado por sus padres ha sido fundamental para replicarlo en sus colaboradores para mejorar la atención que se brinda a los clientes: “Los colaboradores de Triciclo son seleccionados de manera minuciosa teniendo en común el sentido de servicio, logrando que el cliente se sienta que el restaurante es suyo, dando un mejor servicio”.
Este “Triciclo” es pedaleado por parte los hermanos Daniel y Francisco; pero ellos reconocen que nombres como David, Mariana, Daniel, Celia, Viridiana y por supuesto, Doña Pila, han sido fundamentales para conformar el equipo de trabajo que está llevando a este “Triciclo”, a un crecimiento que pronto los conducirá a expandir su consolidación empresarial en la Comarca Lagunera.