EU y ONU, “inquietos” ante referendo kurdo
Los resultados de la consulta independentista en el Kurdistán iraquí se darán a conocer hoy
l gobierno de Estados Unidos advirtió que el referendo en el Kurdistán iraquí para separarse de Irak “aumentará la inestabilidad” en el país árabe, al tiempo que el jefe de las Naciones Unidas, António Guterres, dijo que “está preocupado por las consecuencias potencialmente desestabilizadoras” de la consulta, según declaró su vocero, Stéphane Dujarric.
En un comunicado, la vocera del Departamento de Estado de EU, Heather Nauert, dijo que su país está profundamente decepcionado porque el gobierno regional de Kurdistán, en el norte de Irak, realizó ayer un referendo unilateral de independencia, incluyendo áreas por fuera de la región Kurdistán iraquí, mientras que Guterres afirmó que “respeta la soberanía, la integridad territorial y la unidad de Irak y considera que todas las diferencias entre el gobierno federal y el gobierno regional del Kurdistán deben ser resueltas a través del diálogo”.
El referendo convocado por el presidente kurdo Masud Barza incluye a las provincias de Erbil, Solimania y Duhok, que gozan ya de una amplia autonomía y fue criticado con fuerza por el primer ministro iraquí Haider Abadi, así como por los países del área, salvo Israel, que prometieron medidas de represalia.
Barzani dijo que una victoria del “sí” no será seguida de inmediato de una declaración de independencia, sino que marcará el inicio de “negociaciones serias” con Bagdad. Pero el parlamento iraquí ya aprobó una resolución exigiendo el envío del ejército a las zonas en disputa, bajo control de las fuerzas kurdas.
El resultado de la consulta se conocerá mañana, pero se anticipa que la mayoría de los 5.3 millones de inscritos voten por la independencia de una región rica en petróleo. Los vecinos Turquía e Irán, preocupados porque sus minorías kurdas sigan el ejemplo, también advirtieron con represalias. Los kurdos, divididos entre Irak, Siria, Irán y Turquía, nunca aceptaron el tratado de Lausana de 1923 que los dejó sin un Estado propio. El presidente kurdo dijo el domingo que sería inflexible con la voluntad popular. “La asociación con Bagdad ha fracasado y no la retomaremos. Hemos llegado a la convicción que la independencia permitirá no repetir las tragedias del pasado”.
Desde Bagdad, el premier Abadi rechazó la separación en un discurso solemne. “Tomar una decisión unilateral que afecta a la unidad de Irak y a su seguridad así como a la seguridad de la región con un referendo de separación está en contra de la Constitución y la paz civil”, advirtió.