Milenio Laguna

AMOR AÑEJO, PERO AMOR DEL BUENO…

Blanca y José viven felices su noviazgo; él tiene 75 años y ella 64

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Pues sola tú y solo yo, pa que le buscamos, es lo que le dije a Blanquita cuando la conocí, yo a veces andaba aquí en el pueblo y la veía, solita a la condenada, así que me lance y pues me hizo caso”

José Hernández de la Torre

“Hace nueve años conocí a mi Morenita, así le digo de puro cariño, verdad de Dios… yo enviudé en 2001, viví la soledad y me di cuenta que esta acaba a uno más que el no comer, así que comencé a palabrear con Blanca Estela, ahora, casi a diario nos vemos aquí en San Pedro y vivimos muy felices nuestro noviazgo”, dijo José Hernández de la Torre, quien tiene 75 años y es vecino del ejido San Miguel.

Blanca Estela Nery de 64 años y vecina de la colonia Emiliano Zapata también es viuda y apenada y todo, comenta que está enamorada de José, a quien no duda en llamarle corazón, mi vida o mi “Prieto Lindo”, el amor destella en su mirada, ya que dice, estarán juntos hasta que la muerte los separe.

José y Blanca tienen hijos, pero eso no impide que casi a diario se vean en la Plaza Principal de la ciudad, dicen que el amor mueve montañas, y es la verdad, al amoroso novio no le importa tener que viajar de su ejido a la ciudad para ver a su “Morenita”, la que lo espera sentada en un tronco que está debajo de un árbol, ahí en la plaza, donde en medio de muchas parejitas de jóvenes, resaltan los veteranos amorosos.

“Pues sola tú y solo yo, pa que le buscamos, es lo que le dije a Blanquita cuando la conocí, yo a veces andaba aquí en el pueblo y la veía, solita a la condenada, así que me lance y pues me hizo caso, claro, si batalle, porque ahora si como dicen, el que quiera azul celeste, pos que le cueste”, dijo José.

Por su parte, Blanca Estela comenta que como toda pareja de novios, también se pelean, duran días si hablarse, pero al poco tiempo que se vuelven a ver, José con palabras de cariño y pasión, la convence, y pues a darle que es mole de olla, a comer a la fondita para luego seguir con el postre de amor, porque dice José, “yo vengo a lo que vengo”, y sonríe pícarament­e. El amor es para siempre, por ello, José y Blanca afirman que se seguirán viendo hasta que la muerte los separe. “Pa que nos juntamos, así estamos bien, somos novios y así seguiremos, nos amamos y es lo que cuenta, si en un futuro uno de nosotros se va, pues se acabó el corrido, en la vida, porque en la muerte, seguro nos seguiremos amando”, dice la pareja de enamorados.

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José y Blanca tienen hijos, pero eso no impide que casi a diario se vean.

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