Trump, sin prisa ante su disputa con China
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, no espera muchos progresos en las conversaciones comerciales con China esta semana en Washington, dijo ayer en diálogo con Reuters. En una entrevista, Trump afirmó que no “tiene un periodo de tiempo” determinado para resolver la disputa comercial con China. “Soy como ellos, tengo un horizonte a largo plazo”, agregó.
Las conversaciones de esta semana se producen cuando entran en vigor nuevos aranceles a bienes chinos por valor de 16 mil millones de dólares, junto a medidas de represalia de Pekín sobre bienes estadunidenses valuados en un monto similar.
La Oficina del Representante Comercial de Estados Unidos también está realizando audiencias esta semana sobre propuestas para otros gravámenes sobre bienes del gigante asiático por valor de 200 mil millones de dólares.
Trump afirmó que los negociadores chinos llegarían en corto plazo y agregó , “no anticipo demasiado” de las discusiones entre funcionarios de rango medio”.
Impacto a consumo masivo
Una amplia gama de empresas estadunidenses tiene un mensaje para el gobierno de Donald Trump: los nuevos aranceles por 200 mil millones de dólares a las importaciones chinas obligarán a los estadunidenses a pagar más por artículos que usan cotidianamente, desde cunas hasta ataúdes.
Seis días de audiencias públicas sobre los aranceles propuestos de hasta 25 por ciento comenzarán el lunes en Washington, como parte de los esfuerzos del presidente Donald Trump y de la Oficina del Representante Comercial de Estados Unidos (USTR) para presionar a Pekín a hacer cambios radicales en sus políticas comerciales y económicas.
Miles de productos de consumo podrían verse afectados directamente a fi nes de septiembre. La lista de aranceles por 200 mil millones apunta, entre otros, a mariscos, productos inmobiliarios y de iluminación, llantas, bienes químicos, bicicletas y asientos para bebés procedentes de China. “Los aranceles adicionales propuestos a las importaciones chinas amplían drásticamente el daño a los consumidores, trabajadores, empresas y la economía estadunidenses”, dijo la Cámara de Comercio de Estados Unidos en un testimonio escrito para la audiencia.