Más ciudadanía, Menos masa
Esta semana tuve la oportunidad de escuchar en Washington al Dr. Hernán Garrido Lecca, el es ex ministro de vivienda de Perú, pero aparte de eso es escritor de cuento para niños, consultor, inventor entre otras cosas peculiares y sobresalientes, un ejemplo de que en la vida podemos ser todo lo que queramos y no encasillarnos solamente en el traje de banqueros o en los jeans de granjeros.
Pero no les voy a hablar de eso, el mencionó en su plática el concepto de “MAS CIUDADANÍA, MENOS MASA” (En realidad él usa la palabra Masa como Muchedumbre, pero acá en México se escucha muy feo y no quiero ofender a nadie), su punto es que la población cada día somos más masa y menos ciudadanía, es decir que actuamos con la inercia sin razonar o cuestionar y no por que no tengamos la capacidad, sino que cedemos a los hechos y simplemente nos conformamos, no somos capaces de inconformarnos y de actuar y no les digo que nos levantemos en armas, empecemos al momento de ir a votar, razonemos el voto, no seamos muchedumbre de esa que va y vota por un color solo porque es “tradición” en la casa o de esos que nos regalan un lunch o 500 pesos y nos comprometemos a votar por un partido, no se vendan tan barato.
Y esto no solo aplica en temas electorales, aplica en todo, al gobierno le convienen las muchedumbres porque son más fáciles de manipular y los gobiernos manipulan, no les gusta la gente que piensa, que cuestiona, que encara, que propone, porque este tipo de ciudadanía los incomoda, pero es la que los hace actuar correctamente. Hoy más que nunca en América Latina necesitamos ser mas ciudadanía y menos masa o en otras palabras más pueblo y menos muchedumbre, es erróneo pensar que la inacción o el adormecimiento colectivo no nos va a afectar, si se hunde el barco todos vamos en él y tarde o temprano nos va a empezar a tocar los pies el agua. Así que yo los invito a que reflexionen y piensen en qué lado están ustedes ahorita, lo peor que le puede pasar a un país es un pueblo que se conforma y como les dije esto aplica en la casa, en la escuela, en el trabajo, en la política ya sea en los partidos o como ciudadanos al momento de votar, siempre se corre el riesgo de ser parte de la muchedumbre si no aprendemos a cuestionar, proponer y actuar.