Ariosto Otero. “El muralismo mexicano existe y es milenario”

El artista realizó para la Secretaría de Gobernación El regreso de los dioses, en referencia a las deidades prehispánicas

Son ya 43 años de trabajar sin renunciar a los andamios, de consolidar su compromiso social y político, de denunciar las injusticias y barbaries a través de la historia; en una frase, de dar su vida por el muralismo. Es Ariosto Otero, el artista que recrea cada una de las escenas de los seis murales que hizo recientemente para la Secretaría de Gobernación (SG).

A un mes de festejar su determinación de crear una obra monumental, justifica la vigencia del muralismo, no sin antes aclarar que pintar paredes

no lo es.

A unos pasos de su impactante obra, El regreso de los dioses, hace referencia a las antiguas deidades prehispánicas como la Coyolxauhqui, pero también a la invasión colonial hace más de 500 años, y la lucha emprendida por las mujeres y el movimiento que tomó las calles en 2019.

Al hablar de los detalles, precisa que una obra, para que sea considerada un mural, “debe tener un guion como una película, debe ser arquitectónico, con poliangularidad, épico, didáctico, una leyenda y una gran escenografía”.

No cree en los tres grandes del muralismo (Rivera, Siqueiros y Orozco), ya que desde su perspectiva, hubo otros grandes artistas, como O’Gorman, Alfredo Zalce, González Camarena, Dr. Atl, Chávez Morado y Fermín Revueltas. Para él son grandes todos aquellos que se subieron al andamio para que permaneciera la fuerza de México en los muros.

Está convencido de que el muralismo sigue vigente, de que hay unos 10 artistas como él, dispuestos a prolongar esta expresión.

Con 68 murales realizados en Ciudad de México, Otero muestra sus obras, emprendidas desde 2020 hasta 2022, en la Secretaría de Gobernación: Nido de serpientes, Los fantasmas del neoliberalismo, Los dioses, Los tlaloques, El regreso de los dioses Democracia, derechos humanos y justicia social.

La crítica de arte Avelina Lésper, directora de la Colección Milenio Arte, dice en la cédula de explicación de la obra monumental en la SG: “Los murales del maestro Ariosto Otero son el espejo y oráculo de nuestra historia (…) El mural pétreo es una disciplina que solo los grandes maestros abordan por su dificultad técnica y estética, el maestro domina el lenguaje del muralismo de

yde Cultura, “y quien dirige la cultura de nuestro país para decirlo directo, ella no se enteró de que el muralismo mexicano existe y es milenario, pues no inicia desde 1921, con el muralismo vasconceliano, que ojalá tuviéramos a uno como él en la Secretaría”.

Las instituciones están celebrando un año después el centenario del muralismo de Vasconcelos. “La secretaria de Cultura no sabe que el muralismo tiene 3 mil 700 años de narrativas, desde los códices prehispánicos, que son grandes murales y narraciones”, sostiene Otero.

Visión de nuestra cultura

Alejandro Encinas, subsecretario de Derechos Humanos, Población y Migración de la Secretaría de Gobernación, al pasar por los murales de Otero, recientemente inaugurados, reconoce el trabajo del artista: “El maestro Ariosto es de primera, ofrece una visión muy integral de nuestra historia y de nuestra cultura, con una gran interpretación”.