La regla de la excepción
Aquel que niega la realidad sabiendo que miente padece de una sociopatía. ¿O usted de verdad cree que la elección interna de Morena ha sido un paso histórico en la democracia mexicana? Liópez Obrador sabe que sabe...
Con los ojos de plato y plata, Gil persistía en su lectura de las elecciones del congreso de Morena: desaseo, mentira, violencia, urnas voladoras, compra de votos, acarreo descarado, carruseles impunes. Ayer decía Gil en esta página del fondo que se le quemaban las habas por saber, oír, el comentario de Liopez Obrador acerca y adentro de las elección interna de Morena. El Presidente celebra que la violencia en las elecciones de su partido haya sido la excepción y no la regla. Liópez Obrador felicitó a los dirigentes de su partido: “Fue una buena jornada democrática, participaron alrededor de 2 millones 55 mil ciudadanos, masiva, para una elección interna. También muchos que eran militantes se inscribieron. Fue una empresa política muy meritoria de los dirigentes: Mario Delgado y Citlali y todos los que participaron”.
Eso sí, hay que mejorar los procesos para que no haya violaciones, inconformidades, acarreos, inducción de votos, “y hubo todavía ese tipo de prácticas, nada que ver con lo que organizaban los adversarios”.
Ah, la pureza. Como diría la mamá de Gamés: era de esperarse, Gil se refiere a la interpretación que hizo el Presidente de las bochornosas elecciones morenistas: “prepárense porque vamos a ver las elecciones del bloque conservador, ahí vienen, eso va a ser importantísimo, observarlas, claro que si se las encargaron al INE, no habrá problemas, ellos son magos, especialistas en altos vuelos de fraudes electorales”.
Negar y negar
Gil no quisiera ponerse pesado, pero las declaraciones del Presidente caen como frutos maduros del árbol de la mentira. Poesía: ¿les cae de madre? ¿De verdad el INE se dedica al fraude electoral? Mientras se acercan los psiquiatras, Gilga se disfraza del doctor Freud: tenemos aquí, queridos colegas, un caso de narcisismo maligno. Aquel que niega la realidad sabiendo que miente padece de una sociopatía. ¿O usted de verdad cree que la elección interna de Morena ha sido un paso histórico en la democracia mexicana?
Liópez Obrador sabe que sabe. La obsesiónesotradelascaracterísticasdeunamente de espanto: “Cuando Calderón fue candidato por su partido, contiende con Creel, hubo acarreo y fraude, y como consta en el 2006 se robaron la presidencia (…) Felicidades a todos los que participaron ayer, ojalá se haga así en los partidos, que en bloque, en el conservador, convoquen a elecciones abiertas para decidir, que no sean nada más los de arriba los que hacen los acuerdos, los enjuagues y deciden en los restoranes de lujo de la Ciudad de México (…) desde luego van a haber problemas, pero el pueblo se equivoca menos y sabe quién es quién”.
Me trae una langosta, por favor, voy a arreglar esta elección interna; por favor, señor, un taco para decidir por el partido en el poder. ¿En serio? Gil iba a escribir aquí una frase ofensiva, pero no se siente capaz, vamos a disfrazarla: no mmr.
Un candidato feliz
De la negación presidencial resultó una iluminación oscura, o como se diga. “Me dio gusto saber que había ganado en el distrito en el que participó El Fisgón, y ni modo que el Fisgón acarreara. Ganó porque ha estado ayudando en algo que es muy importante, no sólo para Morena sino para todos los partidos. El Fisgón ha estado ayudando en la formación de jóvenes(…)”.
El Fis: hip-hip-hurraaa. Este esclarecido militante se presenta como curador, pintor, escritor y caricaturista político. Un renacentista, Pico della Mirandola de La Jornada. Escritor, ni se diga, ahí están sus libros para demostrarlo; curador, faltaba más, faltaba menos, colaboró en el museo que el gobierno le hizo a Monsiváis; pintor, ni se diga, vaya usted a la SEP y verá los murales del Fisgón; caricaturista político, desde luego, sobre todo mientras camina por la pasillos no del todo modestos de Palacio Nacional.
El Presidente tiene razón, este propagandista del régimen dirige la escuela de cuadros de Morena, dibuja para su periódico La Jornada, conduce al menos un programa de la televisión pública, de esos que paga el Estado con dinero de los impuestos que pagan los que pagan impuestos. Bien pensado, Gilga también está contento de que los pillos ganen de todas, todas. Venga Fis, que otro trabajito podemos conseguir, algo habrá, no se ponga nervioso, la amistad con el Presidente da para eso y más.
Todo es muy raro, caracho. Como diría Malesherbes: “Cuando los abusos son acogidos por la sumisión, no tarda en convertirlos en leyes la potencia usurpadora”.
Gil iba a escribir aquí una frase ofensiva, pero no se siente capaz, vamos a disfrazarla: no mmr