Milenio León

Pasión y compromiso: bombero voluntario intenta sofocar incendios

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sión que Adolfo tiene por ayudar a otros lo llevó a auxiliar a la población tras los ataques ocurridos el 9 de agosto en tiendas de convenienc­ia de Irapuato, esto pese a que, desde el pasado mes de julio, ha sufrido una lesión cervical que lo había mantenido fuera de sus labores.

“El 27 de julio me pasó esto, un accidente en motociclet­a, por lo cual estoy así, estoy incapacita­do para hacer alguna otra labor. En el momento del suceso, pues a mí no me interesó, a mí me importó más el apoyar y el ayudar a mis compañeros bomberos”, dijo.

Adolfo cuenta que al momento de lo ocurrido, dicha lesión le provocó cierta impotencia; pero no pasaron muchos minutos para que sintiera la necesidad de auxiliar a sus compañeros, con lo cual puso de manifiesto el amor que siente por su profesión.

“Al escuchar sirenas y pasar patrullas, vi reportes en el radio de lo que estaba sucediendo, y pues, sin más pensarlo, agarré las llaves del carro y les dije ‘agua va’, y ahí me tienes”, agregó.

A lo largo de su trayectori­a como bombero voluntario, y pese a la preocupaci­ón de sus tres hijos e incluso el miedo que ha experiment­ado, Adolfo ha participad­o en múltiples incendios, rescates acuáticos y vehiculare­s; sin embargo, comenta que la experienci­a del pasado martes lo marcó de manera muy particular.

“De todos los incidentes que he tenido este fue el mayor toel davía; estuve en incendios, choques... pero esto, esto sí, wow, en el intento de servir, ni para dónde correr. Porque te reportaban uno, te reportaban otro, y ya no sabías ni qué hacer; se necesitaba­n manos”, relató.

No obstante, más allá del ejemplo que dio tras este lamentable suceso, Adolfo ha dedicado su vida a ayudar a otras personas, pues antes de convertirs­e en bombero perteneció a grupos dedicados a ayudar a los jóvenes.

Ante los múltiples comentario­s que lo calificaro­n como héroe en las redes sociales, él afirmó que él no se califica como tal, ya que el actuó igual que sus otros compañeros.

concluyó._ “Vale la pena, la verdad sí vale la pena todo el esfuerzo que se hizo el martes, y de verdad, si vuelve a suceder esto (ojalá y no vuelva a suceder), si se requiere de ayuda, ahí voy a estar”,

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