Las Afores invertirán hasta en Malasia
Las nuevas reglas de las Afores permiten invertir el dinero de los trabajadores en Fondos Mutuos Activos, SPAC y Cerpi los cuales permiten una mayor diversificación.
Hoy, el dinero para el retiro de los mexicanos que se encuentra en las Administradoras de Fondos para el Retiro (Afores) puede invertirse en Fondos Mutuos Activos, algo que las administradoras esperaban con ansias, pues permite un poco más de diversificación en el 20% que puede invertirse en activos internacionales.
Los cambios introducidos a la Circular Única Financiera (CUF) abren espacio a instrumentos que antes no estaban permitidos o tenían un uso limitado. Además de los Fondos Mutuos Activos, se abrió la regulación a las SPAC (Special Purpose Acquisition Company o Sociedades de Propósito Específico para la Adquisición de Empresas), que son considerados como instrumentos de renta variable y cotizan en la Bolsa Mexicana de Valores ( BMV); y Certificados Bursátiles Fiduciarios de Proyectos de Inversión Internacionales (CERPI), con los que se puede invertir en el extranjero.
Las nuevas disposiciones de la Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro ( Consar) no garantizan que los rendimientos vayan a aumentar demasiado, no solo por el tope de 20%, también porque hay Afores muy conservadoras.
La información con seguridad habrá pasado completamente inadvertida para los 60 millones de trabajadores afiliados a alguna de las 11 Afores que integran el Sistema de Ahorro para el Retiro ( SAR), porque la mayoría de ellos no lee el Diario Oficial de la Federación (DOF) y porque escasas personas son capaces de entender el alcance de la noticia.
La novedad, publicada el 26 de enero, abre el panorama, pero no obliga a las Afores a utilizar estos vehículos que requieren equipos más eficientes, profesionales capacitados y un mejor conocimiento de los mercados. Además, todavía es necesario que se publiquen algunas normas adicionales que quedaron pendientes.
Carlos Ramírez, presidente de Consar, explica que la iniciativa para ampliar el portafolio de instrumentos de inversión responde a diferentes demandas del sistema, como las propias Afores que buscan alternativas de inversión.
Las SPAC son vehículos complejos que pueden invertir en instrumentos emitidos en países como Nueva Zelanda, Taiwán, Tailandia, Sudáfrica y Malasia.
En el país hay solo una SPAC, la de Vista Oil & Gas, la primera petrolera privada en listarse
“La Consar ha exhortado a las Afores a que se profesionalicen, tengan mejores equipos y sistemas para manejar y administrar los riesgos”,
Carlos Ramírez, presidente de la Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro (Consar).
en la BMV. A través de una oferta pública inicial ( OPI), la SPAC le permitió levantar capital para adquirir empresas afines a sus actividades (Vista captó en su salida al mercado 650 millones de dólares). Los analistas esperan que con la llegada de nuevos operadores y licenciatarios se listen otros instrumentos parecidos para financiar la exploración y producción en el sector de hidrocarburos.
El paso a paso
Esta propuesta, es una necesidad natural porque se ha acumulado una gran cantidad de dinero y las opciones locales se han vuelto insuficientes para generar los rendimientos apetecidos. Así, el sistema puede diversificar sus activos y disipar sus riesgos, y no concentrarlos en los instrumentos acostumbrados.
Ramírez asegura que la regulación financiera del sistema de pensiones ha seguido una secuencia previsible, que comenzó en 1997 con un modelo extremadamente restrictivo, puesto que entonces solo se podía invertir en bonos gubernamentales. Conforme ha pasado el tiempo se ha ido sofisticando en sus capacidades y la autoridad ha reaccionado dándole más flexibilidad al régimen.
“Es un proceso que se retroalimenta. La Consar ha exhortado a las Afores a que se profesionalicen, tengan mejores equipos y sistemas para manejar y administrar los riesgos, para que establezcan un mejor gobierno corporativo y tomen mejores decisiones en materia de inversiones, ya que son relevantes para el futuro de millones de personas. Los cambios publicados en enero se insertan dentro de esta lógica de apertura gradual”, dice Ramírez.
De todos modos, siempre se seguirá privilegiando la misma fórmula básica: buscar los mejores rendimientos con el nivel de riesgo adecuado, sobre todo, porque las Afores tienen una responsabilidad fiduciaria con sus clientes y tienen que hacer un análisis profesional para proteger el interés del trabajador.
Ramírez añade que se trata del patrimonio de millones de personas y, a diferencia de otros intermediarios financieros o de inversiones, el SAR es un sistema obligatorio y tiene reglas diferentes a las de un inversionista particular.
El avance ha sido gradual, y cada administradora opta, según sus Comités de Inversión, por las opciones disponibles. “Afore SURA se mantiene a la expectativa de que la Consar emita las nuevas reglas de inversión en fondos mutuos. Cuando estas sean publicadas, evaluaremos la mejor estrategia de inversión en estos nuevos instrumentos. En cuanto a mandatos, de igual manera nos mantenemos abiertos a buscar a los mejores administradores que fortalezcan nuestra estrategia de inversión”, respondió la vocera de Afore SURA.
Según datos de la Consar, SURA es la cuarta Afore con más cuentas en su haber, 7.2 millones, después de XXI Banorte, Banamex y Coppel.
El tamaño de los activos
A 20 años de su constitución, las Afores como grupo se han convertido en el mayor inversio- nista institucional del país, ya que al cierre de 2017 tenían a su cuidado 4.4 millones de millones de pesos ( más de 15% del Producto Interno Bruto anual), lo que permite asimilarlas a algunos de los fondos de pensión más importantes del mundo. Esto cuando las comparaciones son posibles, ya que la mayoría de los sistemas utilizan modelos diferentes y los hay incluso que solo representan un gremio o actividad profesional.
En 2017, las Afores fueron en promedio 9.8% superiores a los instrumentos financieros de la BMV y de otros sectores, aunque al restarle el peso de la inflación, cercana a 7%, la ganancia neta resultó alrededor de 3%.
Todavía hay restricciones
Aun con esta apertura, hay que reconocer que las Afores siguen limitadas en sus capacidades en parte porque para ampliar el régimen de inversión muchas iniciativas, incluso empujadas por Consar, deben pasar por el voto del Congreso. Por ejemplo, los derivados están fuera de su alcance, a menos que se certifiquen y obtengan una autorización especial, lo que pocas han conseguido. También es una restricción considerable la prohibición de invertir fuera del país más de 20% de sus recursos.
El presidente de Consar asegura que aun cuando se está ensanchando el portafolio y las opciones, la posibilidad de utilizar estos y otros instrumentos es decisión autónoma de cada Afore, y no una obligación, lo que les da la libertad de usar los vehículo que mejor conocen, aquellos con los que se sienten más cómodas o que mejor se ajusten a su modelo de negocio.
“Justamente se trata de que se diferencien unas de otras, y que esa competencia las estimule a ser más productivas. Si no fuera así y no hubiera posibilidad de competir, tampoco tendría caso tener una decena de instituciones porque con una sola sería suficiente”, dice Ramírez.
La competencia, además, tiene premios y castigos: se espera que los trabajadores se cambien desde las Afores que dan menos rendimientos hasta las más eficientes, y eso ha hecho que algunas instituciones hayan perdido miles de afiliados.
Pero el cambio no ocurre siempre en la misma dirección. Aunque decidir entre una Afore y otra mejor es un trámite sencillo y gratuito, el hecho es que 4 de cada 10 trabajadores que se cambian de Afore eligen, contra sus intereses, una que da menos rendimientos.
Ramírez explica que, de acuerdo con las estadísticas de Consar, hace solo unos años la cifra era todavía más alta, de 6 sobre 10, pero que los programas de comunicación social y el creciente interés de los ahorradores han mejorado el panorama.
Lo ideal, claro, sería que los trabajadores tomaran mejores decisiones y, atentos a los rendimientos de cada institución, se movieran dentro del sistema buscando los mejores resultados. “Para ello, las Afores deben desarrollar más capacidades y equipos sólidos con profesionistas financieros de excelencia”.
Todavía falta mucho por hacer. Si se revisa el Indicador de Rendimiento Neto a 84 meses, las tres Afores con peores rendimientos administran los recursos de unos 10 millones de trabajadores, que quizá por ignorancia o desgano están dejando de ganar para un mejor retiro.
Carlos Ramírez de Consar dice que aun cuando el SAR ha tenido un gran impacto en la economía del país, y ha encauzado el ahorro de los trabajadores hacia inversiones productivas, los resultados no se pueden comparar porque ningún sistema de pensiones de gran alcance tiene una restricción como la de no poder invertir más de 20% en el extranjero. Esto, que en su momento fue considerado una decisión de estado y está formalizado en la ley, puede ser bueno para la economía y los proyectos en México, pero no necesariamente para las Afores y sus clientes, los trabajadores.
Falta más información. Aunque el trámite para cambiar de Afore es sencillo, 4 de cada 10 trabajadores eligen, contra sus intereses, a una administradora que les da menos rendimientos.