Estamos perdiendo el tiempo
Los inversionistas no son nuestros enemigos, son nuestros socios y debemos de tratarlos con cordialidad. En lugar de insultar, sería bueno ponernos a trabajar.
Quisiera empezar este artículo expresando mi total rechazo a los insultos lanzados por el presidente de la República a los ciudadanos, que el día de ayer, haciendo uso de nuestros derechos consagrados en la Constitución asistimos a la marcha en defensa del INE. Es muy preocupante que la agenda pública se haya concentrado en atacar, insultar y denostar a decenas de miles de ciudadanos, únicamente porque decidimos manifestar nuestra posición en relación con una reforma que no gusta porque debilita a esa gran institución democrática que es el Instituto Nacional Electoral (INE). Hoy más que nunca, no debemos perder el tiempo en confrontaciones estériles y menos hacerlo en momentos claves para el país, donde lo importante debería ser tener un plan de crecimiento para el 2023 que no se ve nada fácil. Qué tal si en lugar de perder el tiempo insultando a los mexicanos, lo utilizamos para resolver problemas añejos, como por ejemplo reducir los niveles de pobreza o lograr el abastecimiento de medicamentos.
Es muy cierto que la economía mundial puede entrar en recesión, todo indica que esto sucederá; la duda es de qué magnitud la esperamos, pero la mayoría de los economistas opinan que se presentará. Como todas las recesiones sus efectos serán distintos para las diferentes economías. Pareciera que en Estados Unidos (EU), dada la fortaleza que ha mostrado esa ese país, la recesión será ligera y no durará más de un par de trimestres, sin embargo en Europa la perspectiva es más negativa toda vez que la guerra de Rusia y Ucrania empaña la visión de futuro. En Asia, que es la parte del planeta que debería de presentar menores problemas, el gran jugador que es China, ha tenido un comportamiento complicado por temas políticos internos, por su política de COVID CERO y su difícil comunicación con EU.
Una recesión en EU no es favorable para los intereses de México, cualquier cosa que dificulte el desarrollo de esta economía nos pegará sin remedio; además tendremos un ambiente de tasas de interés mucho más alto que en años pasados, y siempre que esto ha sucedido, se presionan las fianzas públicas, ya que se incrementa el costo financiero de la deuda. Cuando las tasas de interés en dólares suben, es cuando debemos de tener más cuidado; en el pasado, las grandes crisis financieras que enfrentamos tuvieron mucho que ver con los incrementos de las tasas de interés.
Pero como expliqué al principio, estamos perdiendo el tiempo, porque en esta situación que vive el mundo también existen muchas oportunidades, y la más clara es que deberíamos de aprovechar que muchas empresas —que por diferentes motivos en el pasado se establecieron en China— hoy están pensando seriamente en acercarse más a su mercado natural que es EU. Aquí, a todas luces se ve claramente que somos la mejor alternativa, pero el gobierno en lugar de empezar a crear condiciones idóneas para que estas empresas se establezcan en México lo que hace es poner trabas, cuando lo que se necesita es precisamente lo contrario.
Este gobierno, al igual que ataca y rechaza a los mexicanos que tienen aspiraciones de mejorar, ve en la Inversión Extranjera Directa (IED) a empresarios rapaces que lo único que quieren es hacer dinero y no se da cuenta que estos empresarios son los que generan oportunidades, puestos de trabajo y son un soporte muy importante para el desarrollo económico. El futuro de nuestro país depende en mucho de la IED que seamos capaces de captar; los inversionistas extranjeros no son nuestros enemigos, son nuestros socios y debemos de tratarlos con cordialidad y respeto, amén de crear con ellos las mejores condiciones para que incrementen sus inversiones en México. En lugar de insultar, sería bueno ponernos a trabajar.