Que
el Senado fue uno de los damnificados con la suspensión de la Línea 7 del Metrobús, porque una de las obras se quedó exactamente a la mitad del cruce de Reforma, por donde salen los legisladores con sus vehículos.
Ahorita no les preocupa porque no hay sesiones, pero si convocan al periodo extraordinario a mediados de julio, será zona de caos. Otra vez, porque ya de por sí la suspensión de los trabajos genera embotellamientos en toda el área.