PRUEBAS DE QUE LA TIERRA ES PLANA
Después de más de 50 horas de videos de YouTube, en las que se puede ver con toda claridad las evidencias de que la Tierra es más plana que la popularidad de Manceras, estamos convencidos de que la idea de una Tierra esférica (como nos lo enseñaron en la
Si la Tierra fuera esférica, usaríamos zapatos curvos. ¿Usted ha usado zapatos curvos? Tal vez con arco, pero esos no cuentan. ¿Y si el pie plano no fuera una enfermedad sino una adaptación del cuerpo a la Tierra? ¿Ah verdad? La “Teoría de la Tierra Plana” dice que vivimos como se pensaba en la Edad Media, es decir, que estamos parados sobre un disco que tiene hielo en las orillas. Este disco (no sabemos cuántos kilómetros de ancho tiene) va volando por el espacio sideral a gran velocidad. El Sol y la Luna van girando arriba, logrando el efecto de día y de noche. Suena más lógico que lo del “Ehhh... bruto”, debemos decir. Este viejito loco —de pelo canoso y que no respeta las instituciones— no es quien usted piensa, sino Mad Mike Hughes, quien la siguiente semana lanzará su cohete casero hecho con chatarra. Al igual que ya-sabe-quién tiene un montón de seguidores dispuestos a darle todo su dinero para demostrarle a todos que vivimos en un
compló... científico (iba a volar ayer, pero pensamos que le dio cañangasñangas). Dicen los terraplanistas que la prueba casera para comprobar que la Tierra no es curva es ir a Acapulco y, ya instalado en Caleta- Caletilla, tomar una regla o un nivel de carpintero y ver hacia el horizonte. Si usted camina hasta Zihuatanejo estamos seguros que, además de encontrarse con los cárteles y grupos de autodefensa, comprobará que la Tierra no se va haciendo curva, sino que es más recta que un diputado en funciones. ¡Eso dicen, de verdad! ¡Nosotros lo creemos! Como la Sociedad de la Tierra Plana (eso existe, búsquelo en Google) está convencida de que el ejército, los marinos, los pilotos de avión, los científicos, astrónomos, astrofísicos, la KGB y el FBI nos están engañando, ellos mismos van a lanzar su propio cohete, con la esperanza de que tome suficiente altura y sacar fotos desde allá arriba. ¡Toma eso, NASA!