Dinamita y la Santanera. ¡Qué buena fiesta!... al sabor de la cumbia
En toda la noche, los regios no dejaron de bailar con estas agrupaciones
Ante un público deseoso de verlos y de bailar fue como inició el gran concierto que ofrecieron La Sonora Dinamita de Lucho Argaín y La Única e internacional Sonora Santanera, en el Auditorio Pabellón M.
La fiesta comenzó en punto de las 21:17, cuando los encargados de la cumbia colombiana aparecieron en el escenario.
“Buenas noches, Monterrey, esta noche tenemos una falla técnica por lo que no tendremos la presentación que siempre tenemos para brindarles a todos ustedes, pero como quiera vamos a dar todo lo que esté en nuestra parte para que esa falla no se note y así tengamos una buena velada”, mencionaron los integrantes de la Sonora Dinamita, sin dar detalles de la falla.
“Mil horas” fue el primer tema que se escuchó, aunque fue hasta el segundo que el público en su totalidad dejó su butaca y se paró a bailar con “Qué bello”.
“La suavecita”, “Que nadie sepa mi sufrir”, “Hechicería”, “Escándalo”, “La Cadenita”, “El viejo del sombrerón” y “Oye” fueron algunos de los temas con los que la agrupación puso a bailar a los regios por alrededor de una hora, pues en punto de las 22:20 se despidieron para dar paso a la Única e Internacional Sonora Santanera.
Al filo de las 22:30, la elegancia de la cumbia apareció en el escenario y bastaron los primeros sonidos
de la trompeta para que el público identificara rápidamente uno de sus temas más icónicos: “La Boa”.
“Muchísimas gracias por estar compartiendo con nosotros la música que ustedes han elegido como parte, no solo de esta agrupación, sino de la historia de México, como una de sus favoritas”, mencionaron los vocalistas de la agrupación, quienes inmediatamente después continuaron con “Jugueteando a ritmo” y “El bómboro quiña quiña”.
La velada estuvo llena de baile, aunque en ocasiones tuvo tintes románticos, sobre todo cuando sonaron aquellas clásicas baladas de la Santanera como “Perfume de Gardenias” o “Luces de Nueva York”.
Por alrededor de dos horas la agrupación deleitó a los presentes, quienes pocas veces permanecieron sentados, pues sin duda fue una noche llena de música y baile.