Indagan muerte de migrante durante operativo en Coahuila
Elementos federales se deslindan; defensores aseguran que la víctima “ni para comer tenía”
Durante un operativo realizado el pasado miércoles en la colonia 5 de Mayo en Saltillo por el Grupo de Operaciones Especiales de Coahuila, cerca de las vías del tren, un migrante hondureño murió tras ser abatido por elementos estatales, quienes repelieron una supuesta agresión.
Al respecto, policías federales y elementos de la Guardia Nacional se deslindaron de los hechos, por lo que se investiga el caso.
Según el reporte preliminar de la Policía de Investigación Criminal, durante un operativo cuatro hombres agredieron a los uniformados y aseguran que uno de ellos sacó un arma de fuego y realizó disparos mientras que las demás huyeron, por lo que los oficiales repelieron la agresión.
El director de la Casa del Migrante Saltillo, Alberto Xicoténcatl Carrasco, entrevistado vía telefónica por MILENIO, informó que el joven asesinado, Marco Tulio, de 29 años, estuvo una semana en ese lugar, “ni para comer tenía y ahora dicen que él les disparó y que solo repelieron la agresión; él no iba armado”.
La hija de la víctima, una menor de 8 años que la acompañaba, presenció el asesinato.
Xicoténcatl Carrasco dijo que los hechos ocurrieron cerca de las 8 de la noche cuando algunas familias, incluidos cuatro niños y adolescentes, abandonaron las instalaciones del albergue para seguir su camino en ferrocarril, rumbo a Estados Unidos.
Asimismo, dijo desconocer si los elementos del Grupo de Operaciones Especiales pertenecen a la fiscalía del estado.
En un comunicado, la Casa del Migrante Saltillo informó que En el lugar recaban declaraciones de algunos testigos.
mientras esperaban el paso del tren fueron sorprendidos por un operativo de elementos policiacos, “quienes empezaron a perseguirlos logrando detener a varios, entre ellos una niña con su madre, a quien separaron de su bebé de aproximadamente dos años”, que fue escondido por
las demás personas para proteger su vida cuando vieron que les estaban disparando”.
En la Casa del Migrante Saltillo permanecen algunos testigos de los hechos, por lo que la fiscalía estatal recaba las declaraciones bajo la petición de que se proteja su identidad.