A Margarita (81 a.)
«Abuela, váyase a casa, que nos pone en peligro» se allí! Así sólo se pone en peligro a símismaynosponeenpeligroalos demás», le recriminó un vecino en el descansillo de la escalera. Como siMargaritafueraculpabledealgo, cuando lo que es es víctima. Aquella fue su última salida de casa.
«Y eso que las personas mayores, por prescripción facultativa, tienen que caminar a diario unos 45 minutos. Si no lo hacen, se aceleran sus patologías y su nivel de dependencia aumenta», sostiene Martínez Gómez, quien con ese mismo argumento se opuso en redondoalaposibilidaddeprolongar el confinamiento sólo a los mayores por ser el grupo de más riesgo.
«Además, cuando salimos a pasear tomamos todas las precauciones, somos muy responsables. Somos los primeros interesados en no contagiarnos y en no contagiar a nuestras familias», señala Paca Tricio. «Aun así, cuando yo salgo a la calle con mi mascarilla y mis guantes, perfectamente equipada, veo que la gente se cruza corriendo de acera en cuanto me ve, supongo que porque tengo el pelo blanco. Y veo que esas mismas personas, cuando se encuentran con alguien de otra franja de edad y que a lo mejor no lleva mascarilla, no se comportan así, no salen huyendo como conmigo».
Por no hablar del vicegobernador de Texas, Dan Patrick, quien en Fox News dijo que los ancianos estadunidenses tenían que estar dispuestos a arriesgar su salud (léase a morir) para que la economía funcionara. «Aquí