Zapatistas a la mar
En medio de las campañas electorales más absurdas de la historia de México y a punto de que el mundo vuelva a la vida de antes de la pandemia, surge una iniciativa política tan poderosamente simbólica como necesaria: la travesía marítima que emprenderá a Europa una delegación del EZLN a bordo de un navío bautizado como La Montaña.
La nueva odisea zapatista fue anunciada desde octubre de 2020 a través de un sexteto de comunicados firmados por el Subcomandante Galeano, en los cuales da a conocer este viaje interoceánico que tiene como fin buscar la unión de rebeldías y resistencias globales en contra del sistema capitalista.
Será el próximo 3 de mayo, día de la Santa Cruz, cuando partirá la embarcación insurgente que, durante un estimado de entre seis y ocho semanas navegará el océano Atlántico en el sentido contrario al que lo hicieron las embarcaciones europeas que hace más de 500 años vinieron al continente americano.
Ese mismo día, de acuerdo con el calendario conmemorativo oficial de 2021, está programado que el presidente Andrés Manuel López Obrador realice en el municipio de Felipe Carrillo Puerto un evento en el que se “conmemore el fin de la guerra de Castas, además de escenificar la petición de perdón por agravios al pueblo maya”.
De esta forma, los zapatistas —quienes rechazan haber sido conquistados por los españoles y no desean ningún perdón de ellos— fijarán su postura ante el oficioso evento del actual gobierno, al que han manifestado su oposición radical por el empeño en construir diversos megaproyectos como el del llamado Tren Maya.
“Ya basta —dice el Subcomandante Galeano— de jugar con el pasado lejano para justificar, con demagogia e hipocresía, los crímenes actuales y en curso: el asesinato de luchadores sociales, como el hermano Samir Flores Soberanes; los genocidios escondidos detrás de megaproyectos, concebidos y realizados para contento del poderoso —el mismo que flagela todos los rincones del planeta—; el aliento monetario y de impunidad para los paramilitares; la compra de conciencias y dignidades con 30 monedas”.
Una montaña en alta mar: la metáfora de lo imposible como realidad, la muestra de que la resistencia y la rebeldía aún son posibles en tiempos desesperanzadores.
La nueva odisea fue anunciada desde octubre de 2020