Luego del dedazo, ¿qué quiere Claudia para CdMx?
La forma en que fue escogida Claudia Sheinbaum como candidata de Morena a la Jefatura de Gobierno de Ciudad de México en 2018, no me gustó: es idéntica a la del PRI. Un dedazo desde la oscuridad.
En Twitter se dio la broma de una fotografía con un sonriente, un burlón Andrés Manuel López Obrador, en la que se anunciaba públicamente la presentación de los cinco miembros del Comité de Encuestas de Morena: el Dr. Meñique, el Licenciado Anular, el Compañero Corazón (Presidente del Comité), el Compa Índice y el Licenciado Pulgar. O sea, la mano, el dedo, el dedazo del Peje.
Nunca nos quisieron enseñar, los hombres y las mujeres de Morena, las encuestas que daban como triunfadora a Claudia. Y no lo harán, porque todas las encuestas que conozco, de empresas serias, daban como ganador a Ricardo Monreal.
Así que fue el dedazo de López Obrador el que decidió lo de Claudia, como será el dedazo de Enrique Peña Nieto el que decidirá quién será el candidato presidencial del PRI en 2018. Sí, solo que hay una enorme diferencia, que ya apuntó por aquí, en estas páginas, Héctor Aguilar Camín: Peña Nieto ya no escogerá al futuro Presidente de la República, como sucedía antaño, hasta 1994, en la época del partido de Estado: cuando apunte su dedo, máximo en enero del próximo año, solo habrá escogido al candidato de su partido que, si hacemos caso a las encuestas de hoy, sea quien sea el ungido la tendrá muy difícil, porque todos los aspirantes de ese partido no pasan hoy del tercer lugar; si acaso llegan al segundo.
En el caso del dedazo de Andrés Manuel, Claudia sí será la próxima jefa de Gobierno de Ciudad de México, si volvemos a hacer caso a las encuestas de estos días, que ponen a Morena muy por delante de sus competidores. No veo cómo le puedan ganar Alejandra Barrales por el PRD, o Xóchitl Gálvez o Mariana Gómez del Campo por el PAN, o Rosario Robles o Ivonne Ortega por el PRI.
Por eso la relevancia del ungimiento de Claudia. Así que a mí me gustaría saber ahora qué pretende hacer ella aquí. Esta es una ciudad progresista, incluyente, tolerante, en muchos sentidos libérrima, aunque tengamos muchos patanes racistas, misóginos, corruptos e incivilizados en nuestras calles. ¿Claudia va a ser conservadora como Andrés Manuel, que en mi opinión es la derecha de la izquierda? ¿Va a pretender que haya retrocesos en cuanto al derecho a decidir de las mujeres sobre sus cuerpos? ¿Regresiones sobre los matrimonios igualitarios y los caminos que ahí quedan por recorrer? ¿Y sobre la eutanasia? ¿Y sobre las drogas?
Quiero saber con toda claridad, sin ambivalencias, sin eufemismos, y asumo que millones de chilangos también, cuáles son las políticas públicas en que está pensando Claudia. Yo la he visto siempre como mujer de izquierda, pero también como una persona absolutamente fiel y leal a AMLO, y eso puede implicar que en la campaña nuestra futura jefa de Gobierno se ponga conservadora para ir en sintonía con Andrés Manuel.
Y eso, a mí, no me gustaría nada: yo soy liberal…