Con metástasis, 15% de los casos con cáncer de mama
Algunas veces las pacientes son estigmatizadas, ya que se cree que el avance del mal se debe a que no se atendieron a tiempo, destaca el director del Incan
Cerca de 15 por ciento de las pacientes con cáncer de mama tienen el padecimiento en estados avanzados, es decir, que ha desarrollado metástasis, por lo que el mal se ha extendido a otros órganos y, aunque muchas veces se llega a ese diagnóstico después de la revisión de hasta ocho médicos, la prevención y detección temprana son claves para reducir la mortalidad.
De acuerdo con el director del Instituto Nacional de Cancerología (Incan), Abelardo Meneses, 15 de cada 100 pacientes con cáncer de mama se detectan en estados avanzados, pero además se les estigmatiza ya que se da por hecho que no se atendieron a tiempo. Ante ello, destacó que debe haber corresponsabilidad tanto del cuerpo médico como en la prevención y diagnóstico temprano. “Se les estigmatiza, ¿por qué? Porque uno piensa que dejaron evolucionar el cáncer de mama y cuando están en el consultorio, muchas veces los doctores no hemos diagnosticado la enfermedad de manera oportuna. En promedio, cuando llegan en etapas avanzadas, las hemos visto hasta ocho médicos y no hemos realizado el diagnóstico adecuado. “Sucede que cuando llegan pensamos que ellas son las culpables de estar con el mal en etapa avanzada y no; lo importante es que tenemos que cobrar conciencia porque en las encuestas que se han realizado, 80 por ciento percibe que no las tomamos en consideración y hay que trabajar fuerte en este sentido”, destacó Meneses.
Por ello, las organizaciones Médicos Investigadores en la Lucha contra el Cáncer (MILC) y la Fundación Salvati colaboran con el Incan para acompañar a todos los pacientes en un modelo clínico que incluye apoyo psicológico, fisioterapia, nutrición oncológica y cuidados paliativos. La jefa del Servicio de Cuidados Paliativos del instituto, la doctora Silvia Allende, destacó que las pacientes en estados avanzados requieren de atención física, psicológica y hasta espiritual, ya que incluso un tratamiento adecuado para el dolor acaba con la paciencia del enfermo, por lo que se requieren abordajes agresivos como el uso de morfina.
“¿Cuál es la meta del tratamiento? Llevar el dolor lo más soportable posible, que te deje fluir, hacer tus cosas, estar activo”, destacó al asegurar que pueden hacerse políticas públicas para aliviar el sufrimiento de los pacientes con cáncer.
Alejandra Platas, miembro de MILC, consideró que la necesidad de cubrir todos los efectos secundarios del cáncer de mama metástasico amerita el esfuerzo de la sociedad civil y por ello ha ampliado sus servicios —ofrecidos durante casi tres años— a este segmento de pacientes para ayudarles en el manejo del dolor, servicios de oncoimagen, psicooncología, nutrición e incluso rehabilitación. Alejandro Mohar, responsable del Registro Nacional del Cáncer, habló de la limitación y de la infraestructura que hace obligatoria la participación de las organizaciones sociales en las aportaciones para el cuidado de las pacientes.
Refirió que cada año fallecen 6 mil mujeres por cáncer de mama; 20 mil son diagnosticadas, mientras el tratamiento tarda entre seis y siete meses.
Anunció que como parte de la estrategia de detección de dicha enfermedad mañana se realizará una exposición de salud con servicios de diagnóstico en la explanada del Auditorio Nacional. “No hay forma de que México pueda dar tratamiento y cuidados paliativos a los miles de pacientes con cáncer de mama dada la limitación que tenemos para el diagnóstico. El Seguro Popular, el IMSS y el Issste simplemente no cuentan con la infraestructura y los recursos para el tratamiento médico, para el costo de lo que es el manejo integral”, por lo que resulta fundamental para países pobres y de ingresos intermedios seguir enfatizando que la mejor forma de control de cáncer de mama y otros tumores es a través de la detección oportuna”, abundó.
Meneses concluyó que mientras se requiere una cobertura de 70 por ciento de mastografías para detección de cáncer de mama, apenas se cubre 20 por ciento.