VIH, POR SEXO SIN RESPONSABILIDAD
Carlos N, portador del virus, narra la historia de su “error”
Un 1 de diciembre, fecha en que se conmemora el Día Mundial de la Lucha contra el Sida, Carlos “N” inició un tratamiento tras enterarse que era portador del Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH).
El contacto sexual con otras personas fue la causa de contagio, pero “asumí la responsabilidad de mis acciones. Al principio fue frustrante, pero es una enfermedad que con el tiempo vas aceptando”.
Un diagnóstico oportuno, vivir bajo un estricto tratamiento médico y alimenticio en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), le permiten seguir adelante, lejos de actos de discriminación, pues señala que la noticia la mantiene entre su pequeño círculo social.
El estado de Puebla representa el 4.42 por ciento de los casos notificados del Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida (Sida) al sumar 8 mil 463 registros, informó el Centro Nacional para la Prevención y el Control del VIH y el Sida (Censida).
El registro de casos comenzó en 1983 y hasta 2006 se confirmaron 5 mil 886 casos de este virus que se transmite vía sexual por líquido preeyaculatorio, semen, secreción vaginal; sanguínea por alguna trasfusión, trasplante de órgano, uso de drogas inyectables, o intercambio de agujas, así como perinatal con la leche materna.
De ese último año a la fecha se acumularon 2 mil 577 casos, incluidos 88 en el lapso del primer semestre de este año. El 78.4 por ciento de los casos reportados corresponden a hombres y el 21.5 por ciento restante a mujeres.
De esta manera, Puebla se ubica entre los siete estados del país con mayor número de casos acumulados en poco más 30 años.
Al referirse a la enfermedad, Carlos destaca la importancia de ejercer la sexualidad de manera responsable, porque “pensar que no te puede pasar es un error. Hay personas que quizá toda su vida han tenido relaciones sexuales sin protección y no les pasa nada, desafortunadamente me tocó a mí. Quiero vivir, aún tengo cosas por hacer”, destaca.
Leopoldo Flores, médico infectólogo del IMSS, señala que cada semana recibe de uno a tres pacientes que buscan orientación preventiva sobre el VIH-Sida. El grupo de edad focalizado va de los 20 a 40 años, aunque también llegan derechohabientes mayores de 60 años que desconocen sobre la enfermedad.
De acuerdo con el especialista, la mayor parte de los portadores del virus son hombres, a quienes se les brinda apoyo médico especializado y de trabajo social para que no abandonen el tratamiento, el cual, se basa en al menos seis medicamentos que les permiten tener una mejor calidad de vida y, a la vez, disminuyen el riesgo de transmisión.
“Con tratamiento la esperanza de vida aumenta. Antes, el VIH se consideraba como una enfermedad aguda; ahora es un padecimiento crónico si se hace un diagnóstico y tratamiento en forma adecuada”.
Por otra parte, el director general del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (Issste), José Reyes Baeza Terrazas, señaló que la institución de salud cuenta con un abasto superior al 95 por ciento para pacientes con VIH-Sida, y con una estrategia de apoyo interinstitucional, lo cual garantiza a los pacientes contar con esquemas de tratamientos emitidos por Conasida; además, refuerza campañas de educación y prevención y oferta prueba rápida para detectar VIH en mujeres embarazadas.