Jiménez Espriú reprueba al Colegio de Ingenieros
Estudio sobre Santa Lucía, “mal hecho”, dice; el de Texcoco, único esquema viable hasta ahora: Imco
El próximo secretario de Comunicaciones y Transportes, Javier Jiménez Espriú, consideró que “está muy mal hecho” el estudio del Colegio de Ingenieros Civiles de México (CICM) sobre el costo de la construcción de una terminal aérea en Santa Lucía, que proyectó en 385 mil millones de pesos.
Al término de una reunión privada con integrantes de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC), desestimó la previsión de los ingenieros. —¿Se puede encarecer el aeropuerto como dice el CICM? —No, no, no. —¿Qué opina de los estudios? —Que están muy mal hechos. —Ingeniero, ¿entonces desestima los estudios? —Totalmente. —El Colegio de Ingenieros dice que el precio de mercado no es tan económico como lo plantean por metro cuadrado… —En ese estudio dice el mismo colegio que no hay forma de evaluar bien, porque no hay elementos suficientes, porque está la forma conceptual y luego presupuestan hasta centavos, pero además si ponen ese precio (20 mil pesos), entonces la cúpula que hoy está en el aeropuerto, que son 750 metros cuadrados, costaría 150 mil millones de pesos... entonces está medio mal.
El Colegio de Ingenieros Civiles de México dio a conocer en su dictamen que el costo fi nal del proyecto Ciudad de México-Santa Lucía será de 385 mil 738 millones de pesos, lo cual es más de cinco veces el costo presentado por el próximo gobierno, de 66 mil 678 millones de pesos.
En el estudio se estableció que construir un aeropuerto en la base militar tendrá un costo de 217 mil 428 millones de pesos, más 63 mil millones para obras de acceso y el costo de cancelar el Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM), que será de 160 mil millones de pesos.
Por su parte, el presidente de la CMIC, Eduardo Ramírez Leal, comentó que con lo que se cuenta actualmente es con el proyecto ejecutivo del NAIM, mientras que en el caso de Santa Lucía solo se tiene el anteproyecto. “Se tienen costos paramétricos. Entendemos que se están buscando esquemas para tener ahorros, para generar oportunidades y que se desarrollen otras infraestructuras. No es un tema terminado, se está dando información por parte de los ingenieros, nosotros representamos a muchas de las empresas que están trabajando en el aeropuerto y no son improvisadas”, argumentó.
Ramírez Leal indicó que los puntos de vista del equipo de Jiménez Espriú están enfocados en la base militar, mientras que los constructores, igual que la Academia de Ingeniería, por el tema técnico, tienen información completa y necesaria para conocer el costo del NAIM.
Al respecto, Jiménez Espriú refi rió que los expertos ya anunciaron hacia dónde se tiene que seguir con el proyecto, debido a la información con que se cuenta, aunque dijo entender “que el equipo defienda una propuesta”.
Asimismo, opinó que la actual ley de obra pública forma parte del “monstruo de la burocracia gubernamental”, por lo que se buscará platicar con todos los actores involucrados para realizar las modificaciones pertinentes.
Ramírez Leal recordó que ya existe una reforma a la legislación que fue aprobada por la Cámara de Diputados, pero se quedó atorada en el Senado. No obstante, se mostró abierto a reunirse con el próximo gobierno para sacar una ley que fomente la inversión y reduzca los trámites.
En cuanto al financiamiento de los proyectos, Jiménez Espriú refirió que se valorarán todas las opciones y se buscará aprender de los éxitos y errores de este sexenio.