Ruido al chicharron
Hizo bien mi licenciado Peña al no estar en estos días en un México convulso e intolerable, donde todo le reprochan y nadie le aplaude. Bueno, salvo Chumel Torres y Callo de Hacha que conforman su más aguerrido grupo de admiradores. Digo, primero le echarían la culpa de las típicas lluvias atípicas que típicamente superaron los típicos esquemas de previsión gubernamental que, típico, anualmente acaban rebasados; digo, para ver malas caras y reclamos, mejor dejar que el Plan DN-III haga lo suyo, además de las buchonas que se pusieron a apoyar a la población en Sinaloa.
Y luego, pobre de mi Lic., que con el aniversario de los 43 de Ayotzinapa le iban a estar jeringando con lo de la veldáhistérica, pero histórica, como si no estuviera ya todo clarísimo como los empleados fantasmas que dice la Auditoría Superior de la Federación que se llevaron buena parte del presupuesto durante el gobierno de Eruviel Ávila en el Edomex y que las malas lenguas dicen, a mí no me consta, que eran Godínez en las empresas fantasmas de La estafa maestra.
O sea, si ya el prodigioso trabajo de investigación de CSI Murillo Karam casi que llegó a la conclusión de que todo fue culpa del guante del infinito de Thanos que desapareció a los normalistas, ¿para qué seguirle buscando ruido al chicharrón?
Bueno, hasta le van a echar la culpa de los chorromil tráileres que andan cargando muertos, como si continuar las políticas de
Jelipillo Calderón no hubiera sido lo correcto. Seguro todo tiene su origen en el mea
culpa de Zedillo y por suerte ahí andaba Videgaray, que a pesar de ser un Yago fallido, alcanzó a aplaudirle a Donald Trum.
Nada más nos falta que acusen a Peña Nieto de estar chateando con el senador panista García Cabeza de Vaca mientras este se ponía como Bill Cosby viendo las fotos de una escort que no era escort, en un acto que los exagerados dirán que se trataba de trata.
Lo bueno es que todos sabemos que don Enrique tiene tan bien asumidas sus prioridades que para acabar con una plaga de plantas de mariguana en los márgenes del Periférico de CdMx, se pidió ayuda hasta de la DEA.
Solo le gana Yunes, que utilizó todos los recursos de Veracruz para buscar a las mascotas de un contlapache.
Digo, si a la maestra Gordillo le van a hacer su serie en Netflix, donde se lleva al baile al mismísimo Luisito Rey, mi licenciado EPN merecería su propio show de stand-up
comedy con roast incluido teniendo a Javidú como patiño. A ver si no les dan las comisiones de Cultura y Cinematografía que le arrebataron al PES a petición popular.