Duda Trump sobre su secretario de Defensa
En entrevista, cuestiona el futuro de Jim Mattis como jefe del Pentágono
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, tildó de “una especie de demócrata” a su secretario de Defensa, Jim Mattis, y dijo que “podría” salir pronto de su gabinete. Mattis, considerado uno de los miembros más firmes pero también más independientes del gobierno de Trump, ha servido como contrapeso de bajo perfil al mandatario en su tratamiento a menudo abrasivo de los aliados de EU.
En una entrevista emitida ayer en el programa de televisión 60Minutes de CBS, Trump dijo que almorzó dos días antes con Mattis y que el general de cuatro estrellas retirado de la Infantería de Marina negó que quisiera retirarse pero, afirmó el magnate a la televisora, “podría ser” que se vaya. “Él es una especie de demócrata, si quieres saber la verdad. Pero el general Mattis es un buen tipo. Nos llevamos muy bien. Puede irse. Quiero decir, en algún momento, todos se van”, indicó Trump en esa entrevista
Los rumores de que los días de Mattis como jefe de Defensa están contados han circulado desde que un libro del periodista Bob Woodward sobre la caótica Casa Blanca de Trump consignó que el general había cuestionado la sensatez del magnate, comparando su comprensión con la de un niño de 10 u 11 años. En la entrevista, Trump aludió a los próximos cambios en su gabinete. “Estoy cambiando las cosas y tengo derecho a hacerlo. Tengo gente en espera que será fenomenal. Entrarán en la administración, serán fenomenales”, dijo.
Intervención “ganadora”
Trump consideró ayer que las burlas que profirió contra Christine Blasey Ford, una de las mujeres que acusaron de abusos sexuales al juez Brett Kavanaugh, ayudaron a los republicanos a colocar al magistrado en el Tribunal Supremo. “Si no hubiera hecho ese discurso, no habríamos ganado. Solo dije que ella parecía no saber nada”, argumentó el mandatario en una entrevista en la cadena de televisión CBS.
Durante un mitin electoral el 2 de octubre en Misisipi, Trump se burló de las lagunas en la memoria que Ford había reconocido tener poco antes, cuando testificó ante el Senado para explicar los abusos que supuestamente sufrió en 1982 durante una fiesta, cuando ella y Kavanaugh eran adolescentes.
Ford sostiene que, cuando estaba en un encuentro de estudiantes en una casa, Kavanaugh (acompañado de un amigo) la forzó a meterse en una habitación, trató de quitarle la ropa, toqueteó su cuerpo y le tapo la boca para impedir que gritara, un suceso que terminó cuando ella logró escapar y encerrarse en un baño.
Cuando Ford testificó ante el Senado reconoció que no recordaba algunos detalles, como la forma en la que regresó a casa.
La Cámara alta, donde tienen mayoría los republicanos, confirmó a Kavanaugh para un puesto vitalicio en el Tribunal Supremo el pasado 6 de octubre con uno de los márgenes más estrechos de la historia, puesto que, de los cien senadores, 50 votaron a favor y 48 se posicionaron en contra.
El magistrado fue acusado públicamente de abusos sexuales por tres mujeres.