Municipios retoman el control de seguridad
El titular de la Secretaría de Seguridad Pública Estatal (SSP), Jesús Morales Rodríguez, señaló que las nuevas autoridades de San Martín Texmelucan, Amozoc, Ciudad Serdán y Tehuacán, asumieron el control de sus policías, a la par de descartar inestabilidad en las cuatro demarcaciones donde el gobierno estatal, por decreto, tomó la seguridad.
Abundó que los nuevos gobiernos de dichas demarcaciones se harán cargo de su propia seguridad, esto a solicitud de las mismas.
Asimismo, indicó que la devolución de la seguridad en estos municipios se dio en orden y en estricto apego a la ley, donde ahora corresponderá a las nuevas autoridades de cada Ayuntamiento hacerse responsable de sus cuerpos policíacos.
Por otro lado, descartó que exista riesgo de inestabilidad en la seguridad en Amozoc, San Martín Texmelucan, Tehuacán y Ciudad Serdán, donde tenía injerencia el estado y que sirvió de apoyo para resolver temas graves de delincuencia organizada.
Finalmente, dijo que estarán al pendiente de cualquier situación. A Claudia Rivera Vivanco eflexiona y nos comparte en esta su última aportación sobre sus vivencias y experiencias durante el Movimiento Estudiantil del 68 en México, el investigador y docente de la BUAP- Campus Tehuacán, Antonio Tenorio Adame: “Un dato y hecho de interés que permite revalorar las jornadas iniciales de luchas estudiantiles del 68, es la aportación que, actualmente, la base escolar de Economía en Ciudad Universitaria realizó durante las manifestaciones pasadas en protesta por la agresión que los porros efectuaron contra los estudiantes del CCHAzcapotzalco, cuando se manifestaban por problemas de su escuela frente a la rectoría de la propia UNAM, el pasado 3 de septiembre.
Suceso ante el cual, la base estudiantil de Economía solicitó a los directivos docentes y administrativos el Auditorio de la Escuela para la realización de la reunión central de información y acuerdos que, entre otras cosas, coordinó las acciones generalizadas interuniversitarias de rechazo y condena”.
“El recuerdo del Congreso de Libertad de Presos Políticos, donde se preparó el antecedente del que sería el Pliego petitorio del 68, sobra decir que fue negada la petición, eran otros tiempos, porque ahora en ese Auditorio que ganaron los jóvenes es faro de libertad y espacio de deliberación, como señala la prensa:
“Esta vez la capacidad del auditorio Ho Chi Minh fue insuficiente para dar cabida a la mayor asamblea interuniversitaria que se realiza desde 2014, cuando sesionó para organizar a los estudiantes tras la desaparición de los normalistas de Ayotzinapa. A las 12 horas de ayer se decidió llevar la reunión al Alfonso Caso, de la Facultad de Ciencias, donde discutieron los pliegos petitorios de cada una de las 50 escuelas, facultades e instituciones representadas. Asistieron del IPN, UAM, UPN, ENAH y de universidades de otros estados”.
“El 2 de octubre triunfó. Está presente, los estudiantes ganaron sus auditorios. Defendieron la Constitución, ampliaron y ejercieron las libertades civiles en su propio quehacer universitario junto a los aprendizajes: de la ciencia, de las humanidades y de la tecnología. El Movimiento Estudiantil del 68 está presente”.
“La reunión de estudiantes en Asamblea Permanente del 2018, revive el principio clásico de que “lo bueno permanece: es su continuum”.
“Previo a la gran movilización del 68--iniciada desde el 22 de julio hasta la primera semana de diciembre--se dieron otras manifestaciones de consideración, la más concurrida y emotiva fue la realizada en apoyo a la Revolución Cubana. Se trató de recordar y festejar una gesta heroica que dimanaba toda su hazaña sobre las repúblicas de América Latina, entre los motivos que la impulsaban estaba la conexión generacional. Se correspondían los actores directos con la imagen de jóvenes vinculados culturalmente en el origen común de las naciones y en el ideal concebido por la “utopía socialista”. El otro factor era político, lo promovían las dictaduras impuestas durante el tiempo duro de la Segunda Guerra Mundial, en especial en la región del Caribe y Centroamérica.
“La solidaridad con Cuba no solo se expresó con marchas y protestas contra los gringos y su gobierno, además los jóvenes acudían al momento en que las acciones de los revolucionarios cubanos daban respuesta a las medidas de castigo dispuestas por la Casa Blanca, una de las mayores manifestaciones fue la que se convocó para repudiar la invasión de Bahía de Cochinos, que dio lugar a la decisión del General Lázaro Cárdenas de viajar a la Habana a compartir el riesgo de enfrentar a los invasores, lo cual no sucedió porque el gobierno de Adolfo López Mateos lo impidió, dejando lugar para que acudiera personalmente a invitarle a acompañarnos a la plancha del zócalo donde tendríamos el mitin de repudio a la invasión”.
“Cuando la avanzada de la marcha llegamos al zócalo, el General Cárdenas se encontraba en la esquina oriente del cruce de 20 de noviembre con la Plaza de la Constitución, fuimos por él quien nos acompañó, y no obstante la improvisación y falta de recursos para montar un templete, el accedió a dirigirse con un aparato de sonido de baja potencia trepado en el capacete de un viejo automóvil”.
“Toda la marcha se acomodó a sentarse en el suelo para escuchar con profundo silencio el mensaje del ex presidente, quien exaltó el sentimiento de la patria latinoamericana, para manifestar el sentimiento de la Patria Grande, y la decisión de enfrentar la agresión a Cuba con una creciente y valerosa solidaridad de los pueblos indoamericanos. Esa noche fue gloriosa, quedó inscrita en los grandes sucesos de la Plaza de la Constitución ha visto transcurrir”.
“Otro factor de movilización entre el estudiantado fue el repudio a la corrupción como fueron las manifestaciones contra la estatua de Miguel Alemán Valdez (Presidente de México. 1946 a 1952). El rechazo al ex mandatario veracruzano contrastaba con la admiración y respeto a su antecesor originario de Jiquilpan Michoacán. La corrupción era el fiel de la balanza pero también la mirada del destino de la nación, ya que el primero depositaba su instinto de mejorar la situación del país con el apoyo e imitación de los Estados Unidos, en tanto el ex mandatario michoacano con escepticismo solo estimaba el esfuerzo propio de los mexicanos para alcanzar su bienestar e independencia. Al presidente Alemán se le llegó a llamar “míster amigo” a partir de la entrevista con el presidente Truman. A Cárdenas se le elevó a la calidad de forjador de la “independencia económica y social de México”.
“Los estudiantes compartieron ambas visiones: el lado nacionalista de respeto a la constitución, a la libertad, a la independencia y a la justicia social, sufría el encono del embate pro imperial, lo que se deslindó con mayor claridad por las luchas del Movimiento Estudiantil del 68; mientras del lado de los grupos de ultra derecha de corte anticomunista, de corte radical conservador, de sectores retrógradas del clero, postulaban la dependencia, la imitación a lo gringo, a la vaciedad y la sumisión constituyeron, y también establecieron su continuum en la actualidad en tener que volver a optar entre esas dos visiones y misiones en la vida y devenir histórico de nuestras comunidades, entidades y regiones aunque se encuentren inmersas en la esperanza de un cambio político, económico, educativo- cultural, ecológico, psicológico, social, armónico e integral con el nuevo gobierno de López Obrador”.