Apoya Aspabuap demanda de recursos a universidades
La falta de apoyo a la educación superior no es nueva, situación que ya se presentó
La Asociación de Personal Académico de la Universidad Autónoma de Puebla (UAP) se suma a la lucha que emprendió la Confederación Nacional de Trabajadores Universitarios de México (Contu) a favor de un mayor presupuesto para la educación superior y la universidad pública privada.
El dirigente de la Aspabuap, Jaime Mesa Mújica, resaltó que el secretario general de la Contu, José Enrique Levet Gorozpe, convocó a los sindicatos universitarios, en particular a las instituciones que enfrentan problemas financieros para cubrir el pago de los salarios y las prestaciones de fin de año, a un paro nacional, y el resto de las instituciones pueden sumarse de otras maneras.
Explicó que ante el movimiento nacional, los universitarios poblanos se suman con una campaña informativa, manteniendo las labores académicas y de investigación en la máxima casa de estudios del estado. “Se consideró que para las universidades que no enfrentan esa situación crítica, podrían tener una participación diferente, como el caso de nosotros, de la Aspabuap, que está informando a la comunidad universitaria los problemas de las universidades públicas. Nosotros hicimos algunas publicaciones y estamos haciendo brigadas con mantas alusivas a la situación. Nosotros no hicimos el paro efectivo y lo tradujimos en una expresión diferente para no afectar a los estudiantes”, comentó.
Señaló que la falta de apoyo a la educación superior no es nueva, situación que ya se presentó en los dos últimos años y comentó que lejos de que las autoridades federales le den una solución de fondo, se limitan a autorizar que se adelante el presupuesto del ejercicio fiscal del año siguiente. “Si esta medida se llegara a aplicar para resolver el problema actual, entonces la insuficiencia de recursos para el año siguiente con toda seguridad se estará presentando en los meses de junio y julio del 2019; y así sucesivamente”, expresó.
El representante del personal académico de la UAP lamentó que las autoridades federales apliquen recortes presupuestales a las universidades públicas, por la vía de reducción de los fondos extraordinarios. “Los fondos extraordinarios han sido mutilados en más del 60 por ciento del total, tan sólo en los dos últimos años; es decir, una reducción superior a los 10 mil millones de pesos, situación que complica aún más la ya de por sí crítica situación de nuestras universidades”, expresó. n 1979 se realizó la conferencia internacional de la Atención Primaria de Salud (APS), poniendo de manifiesto en la comunidad internacional, la necesidad de una acción urgente para proteger y promover la salud; emitiéndose la primera declaratoria que posiciona a la APS como estrategia para alcanzar el desarrollo y cuyo lema fue “Salud para todos en el año 2000”. Los componentes esenciales de la APS son: La salud es un derecho humano fundamental, Justicia social, Universalidad, Intersectorialidad y Solidaridad.
Hoy, a 40 años de aquel compromiso gubernamental, social y hasta ético; los perfiles epidemiológicos en la mayoría de países empeoraron de manera proporcional al avance de la la tecnología médica. Esta contradicción se debe a la incorporación de la inequidad social en los procesos biológicos y psicológicos de la gente. Así, según INEGI; del 2010 al 2015 disminuyó la esperanza de vida de los varones mexicanos.
El gobierno a cargo de Andrés Manuel López Obrador se enfrentará a grandes retos en materia de salud, herencia de gestiones neoliberales y que corresponden a los componentes esenciales de la APS. El primero es la salud como derecho.
De acuerdo al párr. 1 de la Observación Gral. núm. 14 al art. 12 del Pacto Internacional de los Derechos Económicos, Sociales y Culturales; “todo ser humano tiene derecho al disfrute del más alto nivel posible de salud que le permita vivir dignamente”. Así, el estado que se compromete con este derecho, adquiere la obligación de proteger, respetar, promover y garantizar la salud; cuyos elementos básicos de cumplimiento son el acceso, disponibilidad, aceptabilidad y la calidad de los servicios de salud. En México, este derecho se encuentra en el párr. 4 del art. 4º constitucional: “toda persona tiene derecho a la protección de la salud. La ley definirá las bases para el acceso a los servicios de salud y establecerá la concurrencia de la federación “Ahora bien, considerando el principio de indivisibilidad de los derechos humanos, se puede identificar una especie de legalización de la violación del derecho humano a salud, ya que de los ocho elementos que debe contener nuestra carta magna, se recortó sólo a dos: la protección y el acceso.
Otro reto de la APS es su carácter universal horizontal y vertical. El primero hace referencia a la cobertura poblacional; y el segundo, al acceso a los tres niveles de atención, sin parcializarlos en paquetes, como quedó en la reforma del año 2003 con el Seguro Popular.
México precisa de una verdadera APS, implementada con perspectiva de género e interculturalidad y basada en tres ejes: paz, equidad y desarrollo ecológico sustentable.
¡Salud para todas y todos, ahora!