¿Cuál es el proceso de selección para los elegidos?
Una imagen, un recuerdo del título femenil en el 2012. Gran parte de los aficionados mexicanos al futbol, o de la mayoría de los ciudadanos en el mundo, que gusten de este deporte, sueñan en su intimidad con representar a su país en una Copa del Mundo. Es una aspiración legítima, una ilusión válida para millones, pero solo apta para unos cuantos. Algunos podrían decirle suerte; también se le conoce como destino. Al fin de cuentas, estar en ese máximo escenario es una recompensa, aunque las vías y las formas pueden ser distintas para llegar a él.
A mediados del 2003, una idea de reconstrucción a parte del tejido social vulnerable, una fórmula de reintegración pasó de ser un proyecto a una realidad comprobable. En la ciudad de Graz, Austria, se constituyó la primera edición de la Homeless World Cup, una Copa del Mundo que brindaba oportunidad para aquellos jóvenes, con un pasado no tan sencillo, algunos casos en calidad de calle, pero que priorizan una superación personal, con el futbol como la mayor herramienta cercana.
El proceso para consolidar con seriedad esta iniciativa no ha sido simple. A 15 años de distancia, la edición anual de este certamen
se celebrará por segunda ocasión en la plancha del Zócalo capitalino, aunque con matices a destacar, a consideración de cuando arrancó. En México se le ha dado seriedad, las selecciones varoniles y femeniles cuentan con patrocinadores que además de entrenamientos físicos, ayudan con fortalecedores psicológicos, para saber manejar la presión.
“Los chavos están muy metidos, muy concentrados con todo lo que han vivido estas semanas. Esperamos hacer un buen papel, defender el prestigio que la selección mexicana ha ganado en estos torneos”, comenta Abraham Miranda, estratega del combinado masculino desde el 2009. “Vamos por un nuevo campeonato del mundo, es el deseo del equipo femenil, la intención con la que nos entrenamos desde el principio. Hay rivales de calidad, pero vamos sin miedo”, remató Heriberto Espejel, responsable del segundo cuadro. Mediante el programa De la Calle a la Cancha, Fundación Telmex ha dado una segunda oportunidad a jóvenes con un presente tortuoso. Esta iniciativa es un filtro, para que hombres y mujeres con talento y disposición para mejorar, encuentren una respuesta en el futbol. Así se arman los equipos que participan año con año en el Homeless World Cup. La fórmula ha arrojado éxito deportivo y superación personal.
Este domingo se llevó a cabo el sorteo que dio a conocer la suerte de las selecciones mexicanas. El torneo comienza este martes y antes de pensar en el título, ambos cuadros tricolores deberán medirse a Italia,
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Austria, Hong Kong y Kirguistán, por parte de los hombres; las mujeres lo harán ante Inglaterra, Grecia, Noruega, Costa Rica, Estados Unidos, Perú y Paraguay.
“Los chavos están concentrados para el torneo; deseamos un buen papel”