Fin del régimen corrupto molesta a gobernadores
Sin chantajes. El Presidente electo ofrece diálogo a rebeldes, pero aclara que no será rehén de nadie; el senador Ricardo Monreal recuerda a panistas que no funcionará su movimiento y presión mediática
El presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, adelantó que tendrá diálogo con los gobernadores que se oponen a los superdelegados, pero no será "rehén de nadie".
Luego de que 12 gobernadores del PAN le enviarán una carta criticando a los superdelegados, López Obrador reconoció que están en su derecho de inconformarse.
“Va a haber diálogo (con los gobernadores), pero no voy a ser rehén de nadie, no voy a dejarme chantajear por nadie, nada más tengo un amo y un mandato, que es el pueblo y el mandato es acabar con la corrupción”, precisó.
El tabasqueño comentó que los gobernadores están muy nerviosos, porque ya se acabó el régimen corrupto y tendrán que acostumbrarse.
"Ya no es de que, a ver, 'vamos a negociar, me quedo callado, no critico, pero me vas a dar un presupuesto especial, un trato especial'. Ya no va a haber moches, ya no se va a manejar el presupuesto de manera discrecional.
"No es que ahora los gobernadores estén protestando y presionando para ver si los llamamos, nos sentamos a negociar y tengan ellos presupuestos extraordinarios. No, eso ese acabó. Ya no hay esos acuerdos, esas transas que hacían", advirtió.
Ante la acción de inconstitucionalidad que anunciaron PRI, PAN, Movimiento Ciudadano y PRD contra los superdelegados, el mandatario electo reiteró que la oposición está en su derecho: "Va a haber como nunca respeto a la legalidad y un auténtico estado de derecho".
Más tarde, entrevistado al salir de la casa de transición, López Obrador indicó que el equipo de transición y el futuro gabinete se mantienen en estrecha comunicación con la dirigencia de Morena y con los coordinadores del partido en el Congreso, con el objetivo de sacar adelante las propuestas legislativas e informar de las mismas a los involucrados.
El coordinador de los delegados estatales que formarán parte de la próxima administración, Gabriel García, aseguró que esta figura está para servir a los gobernadores, respetando la autonomía de los gobiernos estatales.
"No hay superdelegados y no va haber controversia, porque se va a respetar la autonomía y las atribuciones de los gobernadores, vamos a ir a servir a los gobernadores. El único mensaje a los gobernadores es que se va a respetar la autonomía y se va a trabajar con todos".
Sin embargo, reconoció que los superdelegados deberán formar parte de las reuniones de gabinete de cada gobernador.
La disolución es historia
Asimismo, el propuesto para encabezar la Secretaría de Seguridad Pública, Alfonso Durazo, señaló que todas las opiniones sobre la Guardia Nacional y los superdelegados del gobierno federal en la próxima administración son respetables y están en su derecho de expresarse.
Además consideró que los tiempos cuando en el país se recurría a la desaparición de poderes ya pasaron a la historia.
El coordinador de la Junta de Coordinación Política del Senado, Ricardo Monreal, dijo que "ni la movilización ni la presión mediática" de los gobernadores del PAN les va a funcionar con el gobierno del Presidente electo.
Calificó como un "error estratégico" confrontar al Ejecutivo federal desde una entidad federativa o municipio, debido a la debilidad institucional que tienen por su dependencia económica al presupuesto federal.
El líder de Morena en el Senado dijo que hay una diferencia: "Los cánones de la ortodoxia política no son aplicables a él, pues no harán mella, ni la presión, ni la movilización mediática. Por ello, considero que sería preferible buscar una manera distinta de la confrontación para acordar los futuros planes y acciones".
El pasado viernes Félix Salgado Macedonio, presidente de la Comisión de Defensa Nacional, advirtió que el Senado usará su facultad de desaparecer los poderes en los estados donde los gobernadores no acaten las políticas que impulsa la próxima administración morenista.