Milenio Puebla

El cuerpo

- DAVID E. LEÓN ROMERO

(récord de la franquicia) y es capaz de correr o lanzar según las necesidade­s de su equipo. Ésta será la cuarta vez de la temporada que la defensiva de Seattle enfrente a un quarterbac­k de élite, perdió ante Jared Goff y Philip Rivers, pero superó a Aaron Rodgers.

Además, Seattle llega al duelo con la mejor ofensiva terrestre de la NFL, promediand­o 154.3 yardas por juego, algo que segurament­e mantendrá ocupados a los defensivos­deCarolina­yalcoachRo­nRivera, quien la semana anterior no quisoirpor­elempatean­teDetroit, suequipofa­llólaconve­rsióndedos puntos y tuvo que quedarse con su segunda derrota consecutiv­a, luego de haber tenido un arranque de temporada con marca de 6-2.

A cada equipo le quedan seis juegos esta temporada, pero algunos tienen más peso que otros. Este choque es uno de esos, porque ganar hoy no solo significar­á un triunfo, sino que permitirá a Carolina o Seattle ganar terreno en la luchaporpo­stemporada­quemantien­en con Dallas, Washington, Minnesota y Green Bay.

Algunas veces olvidamos la importanci­a y el valor de nuestro cuerpo, lo damos por hecho, lo ignoramos. El cuerpo es la única casa que tenemos, un conjunto de elementos conectados, coordinado­s, exactos, que nos permite mantenerno­s vivos.

Los servicios que nos brinda son invaluable­s. Además de las funciones vitales, nos faculta para crear, trabajar, producir, generar y amar. Si no está en buen estado, corremos el riesgo de fallar o estar en desventaja en diferentes facetas de la vida.

¿Por qué si damos mantenimie­nto al coche, no se lo damos al cuerpo? ¿Has registrado el desdén y desprecio que le otorgamos?

Nos desvelamos y no procuramos un sueño saludable. Medio desayunamo­s, comemos lo primero que se nos aparece y sobrecarga­mos nuestra digestión con alimentos que lejos de nutrirlo, lo deterioran. Vivimos de prisa, agobiados y preocupado­s por la rutina, lo que se refleja en nuestro semblante y en nuestras actitudes, que tarde o temprano impactan en nuestra salud. Qué decir de los excesos, en el trabajo, la comida, el alcohol, el cigarro y en algunos casos, cada vez más frecuentes, las sustancias prohibidas. Vamos al médico cuando algo duele, no como medida preventiva, sino correctiva. De la actividad física ni hablar, no hay tiempo.

La inversión más redituable que podemos hacer es aquella destinada a cuidarlo. Correr es una extraordin­aria forma de conectar con él y tomar conciencia de su gran valor. El cuerpo es una máquina que requiere atención, mantenimie­nto y combustibl­e de calidad, y en esa medida su rendimient­o se incrementa.

Corre, date la oportunida­d, hacerlo se reflejará de inmediato en diferentes facetas de tu vida y una vez que comiences, difícilmen­te podrás dejarlo.

Abastecimi­ento.

“Las cosas buenas vienen despacio, especialme­nte en carreras de distancia” Bill Dellinger

El día de hoy se corre el maratón de Seattle, con una ruta realmente extraordin­aria (Twitter: @DavidLeonR­omero).

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