SNTE, en su peor momento y entregado
La organización gremial más grande de América Latina, el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) llega al inicio del sexenio presidencial en su peor momento y entregado al gobierno electo de Andrés Manuel López Obrador.
El otrora sindicato más poderoso que influía en la designación de titulares de la Secretaría de Educación Pública (SEP), en los presupuestos y en el manejo de recursos, se encuentra en un periodo de crisis.
La fuerza trabajadora del pasado se encuentra en riesgo y lejos, muy lejos de ser un respaldo para los trabajadores de la educación. Hoy, el sindicato de los maestros está a merced del próximo gobierno federal.
El próximo titular de la SEP ya está designado y será Esteban Moctezuma Barragán, quien no tendrá ninguna oposición para que la dependencia sea traslada a Puebla. El propio gremio respaldará el movimiento sin ninguna defensa de los derechos laborales.
El SNTE hoy tiene que recurrir al presidente electo para pedir su intervención para arreglar los problemas derivados de los conflictos internos y la lucha por la dirigencia.
Dentro de la lucha, el presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, resulta el principal beneficiado, porque está ante un gremio débil que no opondrá oposición a ninguna de sus propuestas educativas.
El lunes, una parte del gremio, el llamado grupo Maestros por México que estuvo a favor del regreso de Elba Esther Gordillo a la ya desparecida presidencia del SNTE, sostuvo un encuentro con el presidente electo en el que se solicitó el desconocimiento de Alfonso Cepeda Salas como dirigente del gremio.
Más tarde, Cepeda Salas, quien quedó como dirigente nacional del sindicato ante la salida del ex dirigente, Juan Díaz de la Torre, sostuvo un encuentro con el mandatario electo de México.
En la reunión con la nueva dirigencia, López Obrador expresó: “no se puede poner un vino nuevo en botellas viejas. Ustedes resuelvan”. El mensaje fue claro: el presidente electo no impulsará ningún cambio.
¿Qué pasará? Alfonso Cepeda, a quien se le conoce por su trabajo intelectual y sin reflectores, se mantendrá como secretario general del SNTE hasta que concluya su gestión en 2024.
“El sindicato de los maestros está a merced del próximo gobierno”