Bolivia. Rana Romeo halla Julieta luego de 10 años
El Museo de Historia Natural y Global Wildlife Conservation encontraron dos hembras de la especie Sehuencas; ahora preparan un encuentro romántico-sexual para el 14 de febrero
aLa rana Romeo de Bolivia ya encontró a su Julieta, lo que puede evitar la extinción de su especie. Para encontrar a la compañera del anfibio se realizó una campaña internacional con la que se obtuvieron los recursos económicos para buscar a su pareja. Ahora falta que Cupido les dé el “flechazo amoroso”.
Una expedición del museo boliviano de Historia Natural Alcide d'Orbigny y la organización Global Wildlife Conservation (GWC) dio con Julieta y cuatro ejemplares más, tres machos y una segunda hembra joven, de la especie de rana acuática de Sehuencas (Telmatobius yuracare) en una reserva del centro del país.
Julieta, bautizada así por los científicos, “fue encontrada en una expedición en bosques nublados de Bolivia”, dijo Teresa Camacho, jefa del Departamento de Herpetología del museo.
Un decenio de soledad
Hace aproximadamente 10 años unos biólogos encontraron por esa zona a Romeo, un macho con una esperanza de vida de 15 años, el cual hasta ahora era el único, lo que dejaba a su especie a un paso de la extinción.
Pero con Julieta las puertas para una prole están abiertas. “Han pasado más de 10 años desde que Romeo —la última rana acuática de Sehuencas que se conocía— haya conocido el amor, pero la suerte de este soltero afortunado está a punto de cambiar drásticamente", afirmó GWC en un comunicado.
La novia y sus compañeros fueron colocados en cuarentena en el Centro K’ayra del museo para que puedan aclimatarse a un entorno que replique las condiciones de la naturaleza y también reciben tratamiento contra la quitridiomicosis, una infección causada por un hongo, que suele diezmar a las ranas.
Ahora la prioridad es poner a Julieta primorosa y atractiva para causar una buena impresión en el solitario galán. El macho tiene una longitud de 62 milímetros y es de color café con manchas oscuras, mientras que la hembra tiene 55 milímetros y es un poco más oscura.
“Después de esto Romeo se encontrará con su Julieta. ¡Queremos asegurar las condiciones perfectas para su cita a ciegas!”, dijo emocionada Camacho. Los especialistas del Museo Alcide d'Orbigny, cual celestinos, están tomando todas las previsiones para que Cupido cumpla de manera eficiente su tarea.
“Para reproducir las condiciones en la naturaleza, hemos estado tomando datos de temperatura y calidad de agua de los arroyos muestreados para reproducirlos en los ambientes de cría”, acotó la especialista.
Aunque la prioridad es la consumación del acto reproductor, tampoco hay apuro. “¡Esperamos que haya amor a primera vista!; pero si esto no ocurre, nos tomamos un helado, vemos la película The Notebook (Diario de una pasión), y volvemos a intentarlo”, detalló Camacho.
Pero si Cupido no consigue su cometido, los especialistas evaluan otras alternativas, como recurrir a la tecnología y al apareamiento de los otros ejemplares.
La GWC anunció que junto al museo “trabajarán con un laboratorio en la Universidad Macquarie en Sídney, Australia, en la recolección y congelación de esperma de Romeo y gametos (huevos y esperma) de otras ranas para que podamos probar fertilización in vitro”. China consiguió que una semilla de algodón brote en la Luna por primera vez, éxito de uno de los experimentosdelasondaChang'e-4, la cual aterrizó el pasado 3 de enero en la cara oculta del satélite, la primeraenlahistoriadelaexploraciónespacialenhacerlo,informóla agencia estatal de noticias Xinhua.
Según un equipo de científicos delaUniversidaddeChongqingen China, este hallazgo supone el primer“miniexperimento"debiosfera realizado con éxito en el satélite.
Chang'e-4 llevó consigo semillas de algodón, canola, papas y arabidopsis, así como huevos de mosca de la fruta y algunas levaduras,enarasdepodercrearuna“minibiosfera simple", según Xinhua.
En este sentido, las imágenes enviadas por Chang'e-4 mostraron un brote de algodón que había crecido con éxito, la única semilla que ha conseguido germinar hasta ahora.
Un gran reto
Dicho cultivo, sin embargo, no resulta sencillo: las temperaturas sobre la superficie lunar pueden superarlos100gradoscentígrados durante el día y bajar a los 100 bajo cero por la noche, además de recibir una mayor radiación solar y de presentar una menor gravedad que en la Tierra.
Xie Gengxin, un científico encargadodelexperimentoconplantasenlaLuna,señalóquesuequipo había diseñado un recipiente que mantendría la temperatura entre 1y30grados,permitiendolaentrada de luz natural y el suministro de agua y nutrientes para las plantas, señaló el diario hongkonés South China Morning Post.
Segúnestemedio,dichodispositivo, un cilindro de aluminio de 18 centímetros de alto y 16 de diámetro, pesa tres kilos y tuvo un coste de más de 10 millones de yuanes (1.47 millones de dólares, es decir, 28 millones de pesos).
En cualquier caso, estas plantas no han sido las primeras en crecer enelespacio:unequipodelaNASA yadesarrollóunsistemadezinnias —un tipo de flor— en la Estación Espacial Internacional en 2016.
Además, China anunció su intención de continuar con la ampliación de su programa de exploración espacial, con una misión basada en recoger muestras en la Luna este año y otra en 2020, cuyo objetivo será Marte, según el subdirector de la Agencia Nacional Espacial de China (ANEC), Wu Yanhua.