El campeón buscará mostrar su potencia
Estados Unidos encara el reto de situarse en la Final del Mundial Femenil ante una Inglaterra que está dispuesta a cuestionar a las actuales campeonas del mundo. El boleto a la Final de París está en juego. Las norteamericanas sostienen su favoritismo, después de pasar sobre Tailandia, Chile, Suecia, España y Francia, que sucumbieron al poderío ofensivo del cuadro de Jill Ellis.
Sin embargo, Inglaterra levanta la mano como una escuadra capaz de desafiar la supremacía estadounidense, partiendo de la ambición que navega entre las botas de Lucy Bronze y el discurso de Phil Neville.
“Mis jugadoras quieren ganar. Si no obtenemos un buen resultado, nos sentiremos decepcionados y lo miraremos como un fracaso. No es que sea negativo sino que nuestras expectativas, nuestro deseo y nuestra confianza son grandes”, expuso el seleccionador inglés.
Hace poco ambas selecciones se vieron las caras, el empate a dos goles que en la pasada edición de la She Believes Cup convenció a las internacionales inglesas de que la gesta es posible. Quizá por ello la seleccionara estadunidense mostró prudencia ante la euforia y favoritismo que le puedan conceder. “Nos tendremos que ganar el derecho a seguir en el torneo”, Ellis en la rueda de prensa previa.
Advertido de la capacidad que sus rivales, Neville insistió en la necesidad de igualar su intensidad y de "no regalar la posesión a un bajo precio", por lo que advirtió una batalla por el balón, que pertenecerá a aquel equipo que mande en el centro.
Estados Unidos sueña con el bicampeonato, Inglaterra con impedirlo. Un duelo colosal es el que se espera ofrezcan este día en Lyon.