Stewart y Lynda Resnick, la pareja que cultivó su fortuna
Las vidas de Stewart y Lynda Resnick transcurrieron separadas durante muchos años; sin embargo, una vez juntos formaron una pareja que supo cultivar su fortuna y volverse parte de los agricultores más poderosos de todo Estados Unidos, gracias a que al mezclar sus habilidades construyeron una compañía con productos que se han ganado un lugar en el gusto de los consumidores.
El padre de Stewart era dueño de un bar en Nueva Jersey que no hizo sino beber y jugarse el dinero, mientras que Lynda era una actriz infantil en Beverly
Hills. Nadie hubiera imaginado que llegarían a ser parte de la lista de multimillonarios de Forbes y que, de acuerdo con dicha revista, casi la mitad de todos los estadunidenses comprarían uno de los productos de su empresa: The Wonderful Company.
La compañía, que nació en 1979, cuenta con aproximadamente 9 mil empleados y tiene ingresos por 4 mil 200 millones de dólares.
Su sede está en Los Ángeles y tiene en su catálogo marcas que van desde Teleflora (envío de flores), la famosa agua Fiji, Pom Wonderful (granada y jugo), Wonderful Almonds (almendras), Wonderful Pistachios (pistaches) y Wonderful Halos (mandarinas), hasta Suterra, de productos para el control de plagas, entre otros.
Lynda ingresó a una universidad comunitaria, sin embargo, la abandonó a los 19 años para comenzar su propia agencia de publicidad, donde desarrollaría las habilidades de marketing que más tarde le ayudarían a impulsar el imperio agrícola del que hoy es copropietaria, el cual le valdría estar en el puesto número siete entre las mujeres más
ricas de Estados Unidos que han construido sus propias fortunas sin ninguna herencia.
Por su parte, antes de conocerse, Stewart había logrado desarrollar algunos negocios lucrativos de diversos giros. Fue en 1960 cuando ambos coincidieron tras haber fracasado en matrimonios previos, y más tarde se casaron, creando una mancuerna no sólo para la vida en pareja sino para los negocios. Con la experiencia de Lynda en campañas innovadoras y la visión financiera de Stewart, juntos comenzaron su sueño con la compra de tierras agrícolas en California.
Así fueron creciendo hasta generar un abanico de productos que recogían las riquezas de la naturaleza. Desde almendras, mandarinas y granadas en California, pasando por Toronjas en Texas, hasta agua de un antiguo acuífero ubicado en la isla de Viti Levu, que forma parte de Fiji. El éxito de sus productos los coloca en el lugar 311 entre las personas más adineradas del mundo, con una fortuna de 5.6 mil millones de dólares de acuerdo con Forbes.
The Wonderful Company. Desde almendras, mandarinas y granadas en California, hasta agua de un antiguo acuífero en la isla de Viti Levu, que forma parte de Fiji