Actividad volcánica
El Popocatépetl registró un aumento de exhalaciones
El volcán Popocatépetl, ubicado entre Puebla, Morelos y el Estado de México, registró una reducción de tremor luego de que, en un lapso de 24 horas, presentó 5.5 horas de movimientos característicos por el paso de magma, cuando en días pasados, se registraban hasta 20 horas de dicho fenómeno.
El reporte del Centro Nacional de Prevención de Desastres (Cenapred), los sistemas de monitoreo detectaron 21 exhalaciones que estuvieron acompañadas por columnas de vapor de agua, gases y ligeras cantidades de ceniza que se dispersaron al oeste.
La información del organismo científico muestra que el coloso presentó 327 minutos de tremor de baja amplitud, es decir, casi 5.5 horas del fenómeno. Según su definición geológica, el tremor se produce por los golpes del magma con las paredes de la cámara magmática o en el conducto de salida y por las explosiones de las bolsas de gas o los golpes de los bloques sólidos arrancados y arrastrados en el ascenso contra las paredes de la chimenea volcánica.
“En las últimas 24 horas, mediante los sistemas de monitoreo del volcán Popocatépetl se identificaron 21 exhalaciones acompañadas principalmente de vapor de agua y gases volcánicos. A lo largo del día las emisiones se dispersaron hacia el sector oeste del volcán. Así mismo, se contabilizaron 327 minutos de tremor de baja amplitud”, detalló el organismo científico.
El Cenapred dio a conocer que la actividad registrada por el Popocatépetl se encuentra dentro de los parámetros de la Alerta Amarillo Fase 2. Los escenarios previstos para esta fase, de acuerdo con los especialistas del organismo científico, contemplan que continúe la actividad explosiva de escala baja a intermedia, lluvias de ceniza leves a moderadas en poblaciones cercanas, posibilidad de flujos piroclásticos y flujos de lodo de corto alcance.
“Al momento de este reporte se observa la emisión de vapor de agua y gas al oeste (O)”, destacó el organismo científico.
El grupo de científicos que forma parte del centro de investigación exhortó a la población a no acercarse al volcán y sobre todo al cráter, por el peligro que implica la caída de fragmentos balísticos; mientras que en caso de lluvias fuertes recomienda alejarse de los fondos de barrancas por el peligro de flujos de lodo y escombro.