Por sismos, Banxico revisará PIB a la baja
Fenómenos naturales influirán en el crecimiento de corto plazo al afectar días laborales, capital humano y físico, aunque luego se ajustará al alza
Aunque los efectos de los sismos y huracanes que se registraron recientemente en México serán temporales y moderados, es posible que lleven a que el Banco de México (Banxico) haga una revisión a la baja en sus perspectivas de crecimiento económico de 2017, y posteriormente se deberá observar un ajuste al alza de magnitud similar.
De acuerdo con la minuta de la reunión de política monetaria de la Junta de Gobierno del Banxico, uno de los integrantes explicó que, generalmente, este tipo de fenómenos incide en el crecimiento del producto interno bruto (PIB) en el corto plazo al afectar los días laborables, el capital humano y físico, así como diversos sectores productivos, para posteriormente iniciar un proceso de recuperación conforme se avance en los esfuerzos de reparación de daños.
Sin embargo, la mayoría de los integrantes de la Junta de Gobierno del organismo central reconoció que la información disponible apunta hacia una desaceleración en el ritmo de crecimiento de la actividad económica nacional en el tercer trimestre del año; entre los elementos en contra se encuentra la incertidumbre por el futuro del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLC) y la inseguridad pública.
En la junta se destacó, particularmente, que la cifra del Indicador Global de la Actividad Económica (IGAE) correspondiente a julio fue más débil de lo esperado y algunos integrantes consideraron que la actividad parece estar resintiendo los efectos de un entorno donde persiste la incertidumbre externa.
Uno de ellos especificó que el dinamismo de la demanda agregada ha sido afectado por la incertidumbre sobre la relación bilateral con Estados Unidos, los esfuerzos de fortalecimiento de las finanzas públicas y la composición del ajuste del gasto, así como por las acciones de política monetaria del Banxico.
Algunos miembros de la junta agregaron a lo anterior el problema de inseguridad en México y uno de ellos señaló que en encuestas recabadas por el banco central entre empresas, un gran porcentaje de ellas reportó haber tenido afectaciones.
Otro de los integrantes sostuvo que el crecimiento esperado para 2017 se encuentra ligeramente por debajo del promedio del periodo comprendido entre 2001 y 2016, al tiempo que uno más argu- mentó que es probable que el crecimiento del consumo privado se desacelere dada la todavía baja confianza de los consumidores y la caída de los salarios reales, pero dijo que la magnitud dependerá de en qué medida el consumo privado total continúe siendo apuntalado por el consumo de servicios.
Sostuvo que, ante el ajuste de las finanzas públicas y los diversos factores de incertidumbre que afectan a la economía, no se anticipa una recuperación de la inversión, y afirmó que ésta ha mostrado debilidad por varios años, lo que puede tener consecuencias adversas de consideración sobre la capacidad productiva del país.
Agregó que la inversión pública, que usualmente se caracteriza por efectuar proyectos con elevada rentabilidad social y que son en gran medida complementarios a la inversión privada, ha venido mostrando una fuerte caída en los últimos años, pues notó que, en cuentas nacionales y ajustando por factores estacionales, como por ejemplo, la inversión pública que ha caído en más de 45 por ciento desde su pico en el primer trimestre de 2009 al segundo de 2017.