Comercian entre malos olores y aguas negras
Los vendedores dicen que cuando reparan, solo dura unos días y el problema regresa
Por mes detectan a mil 440 personas de la tercera edad con cataratas, mismas que no se atienden por falta de recursos o porque su seguro médico no incluye los gastos de operación, informó la Asociación Civil “Ganas de Ayudar”.
El presidente y fundador del organismo, Gabino López Zúñiga, manifestó que mediante las campañas, que están desarrollando desde hace un año con el objetivo de combatir los problemas visuales en los sectores de escasos recursos del sur de Tamaulipas, han localizado a 19 mil 200 personas cuya vista se encuentra mermada por carnosidades, retinopatía o problemas similares.
En este sentido, detalló que el 90 por ciento de los casos atendidos son por cataratas, “hablamos de que por mes estamos detectando a mil 440 abuelitos que registran opacidad del cristalino en los ojos, lo que les merma su capacidad visual, ya que uno de los síntomas es la visión borrosa”.
Describió que la vulnerabilidad económica provoca que las personas de edad avanzada no se atiendan, “cuando les preguntamos por qué dejaron avanzar el problema o porque no han recibido atención de un oftalmólogo, nos indican que el principal obstáculo es el tema económico. También apuntan que no tienen un servicio médico gratuito”.
Al respecto, López Zúñiga añadió que quienes sí están afiliados a un aseguramiento de salud, les han expresado que no incluye los gastos de una intervención quirúrgica de este tipo, “por lo que de todas maneras les toca pagar una lente intraocular que, sin incluir los honorarios del especialista, llega a oscilar entre los 5 y 7 mil pesos. Entonces tienen que esperar un largo tiempo para ahorrar y poderse operar”.
Recordó que ellos mediante sus campañas están ofreciendo los tratamientos y operaciones a bajo costo, “lunes y martes estamos recibiendo en las oficinas de la avenida Francisco I. Madero #900 en horarios de 09:00 a 14:00 horas”.
El representante de Ganas de Ayudar A.C. informó que extenderán sus servicios durante todos los viernes de marzo a Pueblo Viejo.
Ya no es nada fuera de lo normal, llevo 14 años vendiendo tacos de barbacoa en esta esquina y siempre es lo mismo”, afirma Domingo Martínez. Expone que la fuga de aguas negras sobre la calle Bolivia es una constante.
Locatarios de la zona ubicada entre las nueve manzanas aledañas al centro de Ciudad Madero, explican que ya han reportado en más de cinco ocasiones los problemas de la tubería, sin embargo, en tres meses no han recibido respuesta por parte de la Comisión Municipal de Agua Potable y Alcantarillado.
En el tramo correspondiente a las vialidades Henry Dunnan y Allende, los transeúntes caminan de puntitas para evitar salpicar su ropa con desperdicios, otros más cargan a sus niños y fruncen el ceño cuando un carro circula rápidamente.
Pese a lo anterior, más de diez vendedores de postres, naranjas, fresas, piñas y otras frutas picadas permanecen sobre las aceras. Al grito de “llévele seño, qué va a querer”, dicen que buscan ganar el sustento del día y afirman que si cambian de lugar ya no estarán a la vista.
Ante el cuestionamiento de que ofertan productos comestibles entre aguas que representan un foco de infección, mencionan que sí estarían mejor si no oliera tan mal todo el día, pero, hasta este martes, no habían recibido la visita de autoridades municipales de Salud, tampoco de la Comisión Estatal de Protección Contra Riesgos Sanitarios (Coepris). “Pero no creas, sí les pedimos sobre todo a las mamás que vienen a comprar que laven bien todo, porque aquí nos chispean seguido”.
Más adelante, en la misma calle Bolivia, se encuentra la
La falta de recursos económicos o de un seguro médico les impide atenderse
rampa de autobuses de la Ruta Número 6 “Madero-Las TorresCarnitas Orta”. Los encargados de las unidades y de repartir el boletaje, dicen que más que el lodo que suben los usuarios a los microbuses, les preocupa el bienestar de los adultos de la tercera edad, “es que sí vienen muchos y luego ya se andan cayendo porque traen sandalias, ya con lo resbaloso es un peligro para ellos. A veces, estamos con el pendiente porque, qué vamos a hacer si se caen”.
Al preguntarles si ya denunciaron la situación, comentan que, en por lo menos tres ocasiones han llamado a la comisión para reportar la fuga, “también en la presidencia nos hemos quejado con los regidores, pero así es esto. Vienen y por 30 días todo funciona, después de eso regresa el mal olor y el agua, hasta parece que lo hacen a propósito”.
En medio de la molestia generalizada entre locatarios, choferes y peatones, las actividades continúan, “nos estamos aguantando porque hay que trabajar, si ya nos tocó estar aquí pues ni modo”, menciona en voz alta el propietario de una miscelánea al escuchar que sus compañeros se están quejando de los fétidos olores.
Cabe mencionar que no es la única fuga que se mantiene en Ciudad Madero, en distintas ocasiones sectores como la Ampliación Unidad Nacional y Árbol Grande han expresado que esta situación es recurrente, tardando hasta 5 meses en obtener solución.
Ni la Comapa ni el Ayuntamiento dan solución al problema de contaminación, dicen