¿CÓMO QUITARSE LA CRUDA POSDEBATE?

¿Después del debate terminó tembloroso y le duele la cabeza? ¿Siente que necesita un caldito de camarón para reponerse después de ver a los candidatos echarse lodo? Sepa que usted no es el único que está harto de la política. ¡Aquí le damos unos consejos por si hoy todavía anda crudote!

Hidrátese

¡Pero con bebidas alcohólicas! Échese unas caguamas al recordar las mentiras de Anaya, tómese una cubita al pensar en los melodramas rancheros del Bronco y brinde con un brandy Don Ríos Piter al acordarse de que Meade ganó tres departamentos tan solo por hostigar a AMLO. ¡Éntrele duro a la guarapeta!

Aléjese de las malas influencias

Si sus amigos se la pasan hablando de política, no les siga el juego. Le recomendamos que vaya a tocar la puerta de algún Testigo de Jehová, en primera para que vean lo que se siente y, en segunda, porque ellos tienen prohibido hablar del gobierno. ¡Terapia gratis, Atalaya incluida!

Coma bien

Ahí le van algunas sugerencias: manitas de puerco a la norteña, Kentucky Fried Chicken Little extra hot, estafado maestro de res, salsa borracha, picaditas, raspados y pedos de monja.

Vaya a jurar

Jínquese frente a la Virgencita y dígale que no lo volverá a hacer y que no caerá en el vicio de ver el debate y hacer memes. Haga una manda, deje una buena limosna y rece treinta padres nuestros. Esto le servirá hasta el 20 de mayo que sea el siguiente debate. ¡Nos vemos ese día!