¿Feliz Navidad… sin estabilidad?
En cada fin de año, las personas intercambian regalos, se desean mejores meses por venir, se felicitan y visitan. Pero quien no puede ofrecer felicitaciones es el nuevo gobierno federal, por la política económica y social que está diseñando, la cual creará inestabilidad, desempleo, desconfianza e incertidumbre .
El presupuesto aprobado este fin de año 2018 oprime a los más pobres de este país y, de este modo, los legisladores exhiben su inexperiencia al aprobar un presupuesto centralista, asistencialismo y opaco. Con este presupuesto, los pobres seguirán pobres, al disminuir sustancialmente los recursos para el campo, la pesca y la ganadería; reduce a menos de la mitad los fondos para las estancias infantiles, lo cual afectará a las mujeres trabajadoras y a sus hijos. Comerciantes e industriales serán afectados por el incremento a la tarifa eléctrica. Es un presupuesto que no promueve la inversión y el empleo; por el contrario, fomenta una política asistencialista y clientelar. Un ejemplo es la reducción de los recursos para la ciencia y la tecnología, así como la desaparición de fondos que promovían el turismo, el destinado a la promoción turística o la desaparición del programa de pueblos mágicos, que dejará a miles de mexicanos en el desempleo y afectando el desarrollo regional. A pesar de las adecuaciones de última hora, el presupuesto es muestra de la reiterada actitud que hemos visto al vulnerar todo lo que signifique un contrapeso al Poder Ejecutivo. Se trata de un presupuesto centralista, quita recursos a los estados y municipios y, por un espíritu revanchista, pierde de vista que la disminución presupuestaria afecta directamente a los ciudadanos y tiene un impacto negativo en la productividad y competitividad regional, por la falta de obras de infraestructura básica. Habría que corregir varios “errores de dedo” , como la afectación al presupuesto para las universidades públicas y por verse, la reducción incomprensible a Relaciones Exteriores y sus consulados. Y contrario a lo anunciado, se disminuyeron recursos a órganos autónomos constitucionales como el INE.El paquete económico también revela la mentira del gobierno federal, que en campaña prometió que desde el 1 de diciembre bajarían los precios de las gasolinas, lo cual no se cumplió. Amarga Navidad porque seguirán los gasolinazos que tanto afecta entre otros, a los concesionarios del servicio público de transporte. Es más fácil llegar al poder que ejercerlo.
Es más fácil llegar al poder que ejercerlo según el sentido común