Alfredo Campos Villeda
“El actual gobierno llegó a la misma conclusión de Mancera sobre los cárteles en CdMx”
Si usted cree que no tienen igual los tumbos del stand up matutino, que abarcan temas tan variados como consultas, balconeos, regaños, correcciones y repeticiones de lugares comunes, hay que asomarse en particular a la capital y la espiral violenta que la zarandea, cuyo punto declarativo acabó emparejando a Claudia Sheinbaum con su antecesor, Miguel Ángel Mancera, de quien quiere borrar todo rastro con la eliminación o transformación de programas.
El hoy senador perredista se afanó en el último tramo de su gestión como jefe de Gobierno en negar, cuantas veces fue necesario, la existencia de cárteles de la droga en Ciudad de México, como si el narcomenudeo fuera una expresión ajena a las grandes organizaciones criminales o, peor, como si su estela de muerte fuera menos grave. Solo basta recordar los casos del levantón masivo en el bar Soho, los desmembrados de Nonoalco y los colgados en puentes de Iztapalapa para medir la dimensión del problema.
Quien sí veía el tamaño del reto desde días antes de tomar posesión era el hoy secretario de Seguridad Ciudadana, Jesús Orta, quien declaró a Jorge Almazán en MILENIO que pacificar la capital iba a ser una tarea titánica, porque los responsables de la violencia en los estados ya habían perdido el miedo a operar en la ciudad al encontrar “facilidades, probablemente de las mismas autoridades”, sea por omisión o de plano “abriéndoles paso”.
–¿Fue un error no reconocer que había cárteles? –preguntó el reportero en aquellaentrevistadenoviembrepasado.
–Las autoridades tenían acceso a evidencias que dibujan una situación de ese tipo de organizaciones –respondió.
Pero al jefe policiaco le llegó la hora de tomar posesión y enfrentar las que en su momento él llamó “evidencias”: tiroteos, ejecuciones, secuestros y ahora un video de quienes se dicen integrantes del cártel Jalisco Nueva Generación con amenazas a otros delincuentes que operan en seis barrios de la alcaldía Gustavo A. Madero.
Con algún ajuste en el vocabulario, sin embargo, el funcionario de Sheinbaum llegó a la invariable conclusión de Mancera y sus voceros, ahora sobre este cártel: “No tengo elementos para decir que tenga una presencia activa”. La misma inamovible respuesta.
Mancera se afanó en negar la existencia de esas organizaciones