¿Y dónde está el Fiscal?
Meses, hasta años, duró la discusión sobre la reforma que convertiría a la Procuraduría General de la República en Fiscalía General. Desde sus funciones hasta la manera en que se nombraría al titular, la discusión fue tortuosa y al final estéril. La Fiscalía, para efectos prácticos, solo cambió de nombre y su titular se volvió transexenal. En lo demás se mantuvo igual o hasta peor: a la flamante Fiscalía se le redujo el presupuesto para su primer año de existencia. El nuevo gobierno tampoco presentó un plan integral para subsanar y corregir sus gravísimas fallas.
Si la lucha contra la corrupción y la impunidad son la bandera del nuevo gobierno, entonces la Fiscalía debería ser el primer órgano importante en reformarse. Se sabe desde hace décadas que los ministerios públicos están mal preparados y mal remunerados. Tienen cargas de trabajo que hacen imposible que tengan un buen desempeño, así actúen de buena fe. La procuración de justicia en México está capturada por los tentáculos de la corrupción y de la ineptitud, que proviene de lo que el Presidente gusta llamar “el antiguo régimen”.
Pero esa no es la única preocupación, porque así como la Fiscalía está en ruinas, los expedientes que maneja también.
El caso Odebrecht, que ha defenes- trado a presidentes en América Latina, se congeló el sexenio pasado. La estafa maestra tampoco ha devenido en culpables. La desaparición de los 43 sigue sin cerrarse, y los principales indiciados ahora se encuentran libres por haber sido torturados en su detención.
Mientras todo esto sucede, el nuevo Fiscal, Alejandro Gertz Manero, ha brillado por su ausencia. La UIF de la Secretaría de Hacienda es la que ha anunciado los grandes golpes, como el de la guerra contra el huachicol. En cuanto a investigaciones abiertas se refiere, ha sido Alejandro Encinas, subsecretario de Gobernación, quien las ha dado a conocer: gracias a él, y no al fiscal, nos enteramos de las múltiples desapariciones en Tamaulipas en las últimas dos semanas.
¿Dónde está el fiscal, entonces? Amparándose contra el Hoy no Circula, según dio a conocer MILENIO antier (https://bit.ly/2UBSoEW). El país arde y al fiscal lo único que le interesa es obtener un holograma cero.
La justicia está atrapada entre la corrupción y la ineptitud