Colosio vive
Hablar de Luis Donaldo Colosio Murrieta es hablar de un político cuyo legado va más allá la ideología de un partido. Sus ideas y ejemplo de congruencia, lejos de ser solo patrimonio del PRI, son propiedad de los mexicanos. Colosio es para México sinónimo de esperanza, la esperanza de un cambio con rumbo, de un cambio con responsabilidad.
A 25 años, México sigue siendo una nación con hambre y sed de justicia. El influyentismo, la corrupción y la impunidad perduran. En muchos sentidos, seguimos esperando que la hora de las respuestas llegue.
Hoy el gran reclamo sigue siendo la democracia. Los mexicanos quieren una democracia verdadera, que vea por todos y no que lleve al poder a quienes velan por los intereses de unos cuantos.
El origen de muchos de nuestros males todavía radica en la excesiva concentración del poder que, como él bien dijo, da lugar a decisiones equivocadas, a los abusos, a los excesos. Un presidencialismo sujeto estrictamente a los límites constitucionales aún parece utópico.
La gran reforma del poder de la que habló Colosio es cuenta pendiente. En el México de hoy, la vigencia de Colosio es indiscutible y es hoja de ruta de lo que como país debemos hacer.
Ahora mismo el nombre de Luis Donaldo Colosio está más presente que nunca, no solo por su legado ideológico, sino también porque su hijo ha incursionado en política.
Luis Donaldo Colosio Riojas es diputado local por Movimiento Ciudadano, y aunque debe ser evaluado por su trabajo, la realidad es que su apellido representa la esperanza de un México diferente, un México mejor.
Creo que Luis Donaldo Colosio Riojas ha sabido escribir su propia historia en el sector privado y ahora en el público; en una plataforma política diferente, se ha mostrado congruente, arrojado y con visión de país.
Por encima de colores, su incursión en la política es positiva para la vida democrática y ha llegado en el momento correcto. Urge transformar la política para transformar al país. Sólo así daremos a las próximas generaciones la nación próspera y en paz.
Frente a las aventuras políticas, los saltos al vacío del presente y los retrocesos a esquemas que ya estuvieron en el poder y no funcionaron, México requiere, quizá más que nunca, de ese cambio con rumbo y con responsabilidad. A 25 años, Colosio vive...