Hugo Lara. “Películas, reflejo de su tiempo”
Sus antecedentes no dejan de ser parte del desafío: todo comenzó con la Historia documental del cine mexicano, a cargo del historiador Emilio García Riera; luego vino la Historia de la producción cinematográfica mexicana, impulsadaporelmismoGarcíaRiera, en colaboración con Eduardo de la VegaAlfaro.
Ese proyecto se mantiene con la Memoria fílmica mexicana, cuya coordinación general está a cargo de Leonardo García Tsao y la editorial del mismo Eduardo de la Vega, en cuyo primer volumen se analizan las películas producidas entre1983y1984.
“Todas las películas son reflejo de su momento, de la sociedad, en mayor o menor medida”. En el caso de las películas revisadas, “habla de un periodo muy particular de la historia reciente de México, una década de crisis en varios sentidos”.
LaspalabraslepertenecenaHugo Lara, uno de los colaboradores del proyecto, donde cada película documentadacuentaconunaficha técnica, la sinopsis y un comenta- rio crítico, con lo cual termina por ser no solo un recuento de la historia del cine mexicano, sino de la sociedad en general, porque se nutre de costumbres, historias, relatos, narrativas… morales o sociológicas, que devienen “un acervo muy importante de nuestra cultura y de nuestra sociedad, que conviene tenerorganizada,analizadaoestudiada”.
“Se llama la década negra del cine mexicano porque es una etapa de producción importante: 80 películas anuales en promedio, con lo cualsemanteníaelmismoparámetrodeproduccióndesdelaépocade oro del cine mexicano, pero había decaídoencuantoapresupuestosy, porlomismo,encuantoacalidad”.
Sin embargo, explica Lara, terminan siendo películas muy exitosas, que arrastran al público popular a temáticas como el narco, las sexy comedias o historias donde se hablaba del barrio, pero en medio delacrisis. Bonifaz._
En Memoria fílmica mexicana también participan como críticos, además de Hugo Lara, Erick Estrada, Fernanda Solórzano, Cecilia Pérez Grovas o Rosario Vidal