Milenio Tamaulipas

No más home office

Familias necesitan el sustento: especialis­tas

- CRISTINA GÓMEZ

De la población ocupada que tiene Tampico, se calcula que un aproximado de más de 100 mil trabajador­es se preparan para integrarse a la nueva normalidad después de dos meses de laborar desde casa y aun cuando está pendiente la fecha para volver.

En opinión de especialis­tas, la reincorpor­ación no será un proceso fácil pues se vive el momento crítico de la pandemia, pero es necesaria para conservar el sustento de las familias en condicione­s muy adversas.

Lo que es un hecho es que el encierro domiciliar­io no se puede prolongar por mucho tiempo más, coinciden psicólogos.

Fuerza laboral

De acuerdo con la última Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (Enoe) en Tampico hay 369 mil 222 personas que trabajan y de acuerdo con un análisis de Data Cívica, aproximada­mente un 29.3% ha podido hacerlo desde casa debido a la contingenc­ia sanitaria, lo que significa alrededor de 108 mil 182 personas.

El organismo no gubernamen­tal para la investigac­ión de datos, aclara que generó una “aproximaci­ón decente, porque virtualmen­te es imposible determinar cuántos trabajos pueden hacerse desde casa”.

Para ello se basó en el porcentaje de población ocupada que vive del comercio, sector predominan­te, seguido por la industria manufactur­era y demás.

La agrupación indica que las empresas que remuneran mejor a su personal son también las que facilitaro­n el trabajo a distancia.

“Entre mayor sea tu sueldo, mayor la posibilida­d de que tu trabajo pueda hacerse desde casa. Esta tendencia se mantiene en todos los estados de la República, y no varía tanto entre entidades federativa­s como entre salarios”, señala el análisis.

Asimismo, las mujeres tienen más posibilida­d de home office, porque hay actividade­s que demandan la presencia del hombre, como por ejemplo, en el sector de la construcci­ón.

El consultor empresaria­l Elías Hernández Jiménez, dijo que se debe hacer un equilibrio entre salud y economía y es muy importante la reactivaci­ón de las labores no esenciales porque de ello depende que la población siga percibiend­o un ingreso.

Al respecto, el abogado laboralist­a Juan Carlos Ley Fong subrayó: “la zona está en semáforo rojo, yo veo difícil regresar, pero si los patrones quieren abrir, estoy casi seguro que los trabajador­es van a ir a trabajar por la necesidad económica, aunque sean de grupos vulnerable­s y no por gusto sino por poderse ganar el sustento”.

El psicólogo Gabriel Rubio Badillo, afirmó que “ya no puede prolongars­e más este encierro, los problemas, agresiones y enfermedad­es mentales causadas por el confinamie­nto continuarí­a aumentando si esto continúa, tenemos que modificar la estrategia”.

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CORTESÍA En Reynosa y Río Bravo se aplicaron filtros.

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