Tamaulipas hace llamado
Gobernador pide mesa de diálogo con productores
El gobierno de Tamaulipas solicitó a la Conagua una mesa de diálogo para poder llegar a un acuerdo y se cumpla con el tratado internacional pero no se deje sin agua a los agricultores, como los del Distrito 025 que comprende 202 mil hectáreas de cultivos en la frontera tamaulipeca.
“Lo que estamos pidiendo es que venga directamente la directora de la Conagua, Blanca Elena Jiménez Cisneros, que se siente con los titulares de los módulos del 025, con los agricultores, con las autoridades estatales, que vean las opciones que se tienen”, dijo el gobernador del estado, Francisco Javier García Cabeza de Vaca.
En el caso de Tamaulipas, explicó, el Distrito de Riego 025 representa 202 mil hectáreas de cultivos de riego.
“Estamos hablando de uno de los distritos de riego más grandes en extensión de la República” y dijo que está en riesgo porque se ha perdido el diálogo, el entendimiento y falta voluntad política con el agua.
“En Tamaulipas y el gobierno del estado está a favor de los agricultores, no podemos dejar pasar una situación de esta naturaleza, nos los podemos dejar sin agua”.
Apuntó que tan solo en Tamaulipas, han sido afectadas las 202 mil hectáreas del Distrito de Riego 025, repercutiendo en bajos rendimientos que dejaron pérdidas por 2 mil millones de pesos.
“Con un buen acuerdo, con un entendimiento, podríamos cubrir tanto las necesidades que se tienen al cumplir con el Tratado con Estados Unidos y paralelo poder cubrir los distritos de riego hoy en día afectados”.
Por ello, dijo, si el gobierno de México no puede resolver la problemática, “entonces que entreguen el control del agua a los estados y ya nos pondríamos nosotros de acuerdo pero ahorita lo que establece la Constitución, es que el responsable de controlar las aguas en el país, es precisamente el gobierno central, entonces que asuma cada quien la responsabilidad que le corresponde”.
García Cabeza de Vaca llamó al gobierno de México a no confrontar a los estados del norte del país en torno al Tratado de Aguas Internacionales de 1944 y a la problemática por la falta de disponibilidad de agua de la Cuenca del río Bravo para uso agrícola.
“Por otro lado tampoco que quieran aventar el problema para otro lado y tengan el intento de querernos confrontar entre estados, cosa que no vamos a permitir; el problema es del Gobierno de la República, que asuma su responsabilidad, así lo marca la Constitución”.
El año pasado, pérdidas hasta por 2 mil millones de pesos
En la rueda de prensa, también estuvo el director general de la Comisión Estatal del Agua de Tamaulipas (CEAT), Luis Javier Pinto Covarrubias, quien indicó que la crisis del agua dejó el año pasado pérdidas por dos mil millones de pesos, al abordar la disponibilidad del agua para el Distrito de Riego 025 Bajo Río Bravo.
Apuntó que son 17 presas que conforman la Cuenca y se debe repartir equitativamente en todos los usuarios de todos los usos.
“Son 10 distritos de riego, y tres de ellos en Tamaulipas y esos tres conforman el 50 de todos los dis
tritos de la Cuenca, por eso consideremos que es necesario que haya reparto equitativo y se cumpla con el tratado, para no caer en un replanteamiento, ya que tenemos situaciones favorables que cada cinco años se puede hacer ajustes y cumplir con lo que se debe entregar a Estados Unidos”.
La distribución para cumplir con el Acuerdo no fue equitativa en el ciclo agrícola 2019-2020; en la parte alta del Distrito les dieron 100% y a la parte baja solamente 42% de su concesión (490 m3) que solo alcanzó para un riego, lo cual repercutió en bajos rendimientos en cultivos como maíz, sorgo, ocra y algodón, con pérdidas económicas aproximadas de 2 mil millones de pesos.
El Tratado de Límites y Aguas de 1944, establece que de los escurrimientos el río Conchos, en Chihuahua; los ríos Las Vacas, San Diego, San Rodrigo y Escondido, en Coahuila; y Río Salado, en Tamaulipas; se deberá entregar a Estados Unidos, un tercio que equivale a 431.7 m3 en promedio anual, en ciclos de 5 años.
A la fecha se registra un faltante de 379.8 m3, de acuerdo al último reporte de la Comisión Internacional de Límites y Aguas (CILA), ante lo que las entidades federativas involucradas y el Gobierno de México tomaron acuerdos para cumplir con la obligación internacional y garantizar la disponibilidad de agua para riego en el lado mexicano; acuerdos que no han sido cumplidos por la Federación.